China está bien preparada para manejar difícil ejercicio de equilibrismo

Actualizado a las 17/12/2016 - 10:51

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BEIJING, 16 dic (Xinhua) -- Una recién concluida reunión anual definió las prioridades del trabajo económico para al próximo año y todos los detalles confluyen en un solo mensaje: China enfrenta un difícil ejercicio de equilibrismo y está lista para continuar con su buen trabajo.

La estabilidad y la reforma son dos términos claves del documento emitido al término de la Conferencia Central sobre Trabajo Económico que ubicó la "búsqueda del avance a la vez que se mantiene la estabilidad" como tema central.

No es una tarea sencilla pues la economía china ha llegado a un crítico periodo de transición.

La segunda economía más grande del mundo tiene que aliviar la carga de la deuda, abordar los riesgos financieros y reducir el exceso de capacidad a la vez que mantiene un crecimiento estable para alcanzar su objetivo de crecimiento en 2020.

China ya logró tener un desempeño impresionante en el 2016 en medio de una creciente incertidumbre global, de presiones económicas a la baja en el país y de importantes riesgos financieros.

El gobierno ha elaborado planes de desarrollo para los próximos cinco años y ha continuado con las reformas estructurales enfocadas en la oferta para volver a equilibrar el crecimiento. China cumplió este año con sus objetivos en reducción de capacidad y ha asegurado al mismo tiempo un crecimiento estable de cerca de 6,5 por ciento.

China enfrenta un entorno externo y un entorno interno desafiantes en el 2017: un creciente proteccionismo en el mundo y riesgos financieros tanto en el país como en el exterior. Lo que el gobierno debe hacer es continuar con el buen trabajo y mantener un delicado equilibrio.

China cuenta con las herramientas de política y con la estrategia para implementar este difícil ejercicio de equilibrismo: una postura de política macro estable con una política fiscal activa y una política monetaria prudente; una postura de política industrial precisa encaminada a mejorar la calidad de la oferta; y una postura de política micro flexible para revitalizar el sector privado.

Buscar la estabilidad no significa dar marcha atrás a las reformas como lo indicará el comentario del sábado del Diario del Pueblo. La dirigencia central está muy consciente de los problemas que afectan el crecimiento del país y está decidida a abordarlos.

La clave para resolver el desequilibrio estructural reside en impulsar la reforma enfocada en la oferta, se indicó en la reunión, en la cual se especificaron cinco tareas principales: reducir el exceso de capacidad industrial, reducir las reservas, el desapalancamiento, reducir los costos corporativos y mejorar los eslabones débiles.

Las prioridades de reforma también hacen énfasis en equilibrar estabilidad y crecimiento.

Por un lado se realizarán más esfuerzos para mejorar la competitividad del sector agrícola del país, las empresas de propiedad estatal y la economía real, prometedores nuevos motores del crecimiento. Por el otro, el país explorará un mecanismo de propiedad de largo plazo orientado hacia el mercado para evitar un estallido de la burbuja financiera.

Los desafíos y tareas por delante no son de ninguna manera pequeños, pero la confianza, la determinación y las acciones sensatas sacarán adelante a China.