Tres personas afrontan cargos criminales por comerciar con más de 3.000 toneladas de desechos médicos en la provincia oriental china de Jiangsu, muchos de los cuales fueron convertidos en juguetes y vajillas.
La policía de Nanjing indicó a principios de esta semana que los sospechosos, uno arrestado y otros dos bajo fianza, fueron capturados durante una redada policial que confiscó 13,5 toneladas de residuos médicos, incluyendo sondas intravenosas, jeringas, agujas y botellas de cristal para antibióticos, en un centro de recogida de residuos el pasado agosto.
Los residuos médicos pueden contaminar el ambiente y expandir enfermedades, y las leyes chinas requieren que los residuos médicos sean eliminados según las regulaciones, añadió la policía.
Las fuerzas del orden encontraron que el representante legal del centro, registrado como una firma de tecnología ambiental, compró más de 3.000 toneladas de residuos médicos de hospitales en Nanjing por entre 800 yuanes (115 dólares) y 1.000 yuanes por hospital, cada mes desde 2012.
Los materiales eran procesados en el centro. Los residuos plásticos fueron convertidos en partículas de plástico y vendidas a factorías. Algunas de las partículas fueron usadas para fabricar falsificaciones de juguetes de marca y vajillas, agregó la policía.