Gobierno de Venezuela desea pasar a "segunda fase" de diálogo con oposición

Actualizado a las 07/02/2017 - 09:52

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El gobierno de Venezuela expresó este lunes su deseo de pasar a una segunda fase de diálogo con la oposición local, al tomar en cuenta las propuestas realizadas por los acompañantes internacionales.

Mediante un comunicado, la delegación del gobierno socialista para la ronda de conversaciones saludó el documento que "de forma activa, reflexiva y generosa" redactó la comisión internacional conformada por el Vaticano y por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).

"Manifestamos nuestra disposición para trabajar las propuestas esgrimidas, siempre en el marco del respeto de nuestra Constitución y nuestras leyes", apuntó la delegación, que se comprometió también a trabajar para que la Asamblea Nacional (Congreso) se apegue a derecho y acate las sentencias del Poder Judicial, que la declaró en desacato.

Por su parte, la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) rechazó en días pasados el texto presentado por los acompañantes internacionales y, en cambio, aseguró que trabaja en una propuesta alternativa para activar una nueva ronda de conversaciones.

El gobierno del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acusado por opositores de incumplir los acuerdos, lamentó que a pesar de que la inmensa mayoría de venezolanos apoya el diálogo, la dirigencia del bloque conservador no "ha podido (...) afrontar y cumplir con valentía los compromisos asumidos".

Por el contrario, agregó, "la oposición incurrió en desafueros aún mayores, al intentar un 'golpe de Estado parlamentario' contra el presidente" Maduro, sobre quien pesa un proceso de responsabilidad política y una declaratoria de "abandono de cargo" por parte del Congreso.

Sostuvo que "aun así, y a pesar de que las ambiciones internas de esa dirigencia de la derecha venezolana obstaculizan los esfuerzos del diálogo y la paz", el gobierno insiste en la paz y en el trabajo de la mesa de diálogo instalada el 30 de octubre de 2016.

El proceso de acercamiento, mediante el cual el gobierno y la oposición de Venezuela buscan dirimir sus diferencias, se encuentra estacando desde diciembre pasado, cuando el bloque conservador criticó que Maduro estaba incumpliendo parte de sus compromisos.

Pese a ello, la dirigencia izquierdista sostiene que ambas fracciones han tenido "centenas de reuniones", algunas de ellas "a puertas cerradas".