BRASILIA, 13 abr (Xinhua) -- El presidente de Brasil, Michel Temer, admitió hoy, en un video divulgado por su asesoría de prensa, que se reunió en 2010 con el ejecutivo Marcio Faria, ex dirigente de la constructora Odebrecht, quien lo acusó, en delación premiada ante la Justicia, de haber negociado un soborno.
En el testimonio, divulgado el pasado miércoles por el Supremo Tribunal Federal (STF), Faria señaló que participó en una reunión dirigida por Temer en la cual fue discutida la "compra del PMDB (Partido del Movimiento Democrático Brasileño)" por 40 millones de dólares.
Bajo el acuerdo de delación premiada, Faria dijo también que no discutió valores con el actual mandatario, tal como puede ser comprobado en el video difundido por el STF.
Temer, por su parte, admitió haberse reunido en 2010 "con un representante de unas de las mayores empresas del país".
"La mentira es que en esa reunión yo haya oído referencia a valores financieros o negocios irregulares de la empresa con políticos. Eso jamás ocurrió. Ni en esa reunión ni en cualquier otra reunión que yo haya hecho a lo largo de mi vida pública con cualquier persona física o jurídica. Jamás colocaría mi vida en riesgo", enfatizó el presidente.
"El verdadero hombre público tiene que estar a la altura de sus desafíos que involucran buenos momentos y momentos de profundo malestar. Mi mayor aliada es la verdad, materia prima del Poder Judicial, que revelará toda la verdad de los hechos", agregó el jefe de Estado.
En la noche del pasado miércoles, luego de darse a conocer la delación de Faria, Temer divulgó una nota oficial afirmando que "jamás trató valores con el señor Marcio Faria".
Además, sotuvo que "la narrativa divulgada hoy no corresponde a los hechos y está basada en una mentira absoluta".
Las delaciones premiadas de 77 ex ejecutivos de la constructora Odebrecht revelaron que la empresa pagó durante varios años sobornos y contribuciones ilegales a todos los principales partidos políticos brasileños.
Con base en esos testimonios, el STF autorizó investigar a 8 ministros del gobierno de Michel Temer y más de 70 congresistas, además de decenas de otras personas.
En el caso de Temer, también citado por los delatores, la Corte no autorizó que sea investigado, ya que la legislación no permite pesquisas de hechos ocurridos previos al mandato del presidente.
Todos los partidos de la base aliada del gobierno tienen al menos un legislador bajo investigación.