SAO PAULO, 30 may (Xinhua) -- China y Brasil lanzaron oficialmente este martes en Sao Paulo el Fondo China-Brasil de Cooperación para Expansión de la Capacidad Productiva, con recursos iniciales de 20.000 millones de dólares, para financiar proyectos de inversión que son de interés para ambas partes en suelo brasileño.
La firma de los términos de constitución de ese Fondo fue realizada en Sao Paulo, en el ámbito del Foro de Inversiones Brasil 2017 (FIB2017), en el hotel Grand Hyatt de la capital paulista, por representantes del Clai Fund (Fondo China para América Latina) y del Ministerio de Planificación de Brasil.
La génesis del Fondo Brasil-China ocurrió durante la visita del presidente chino, Xi Jinping, a Brasilia en 2015, y fue concebido como un mecanismo para poner a las autoridades y al sector privado de los dos países a discutir inversiones, prioridades y una agenda común.
El Fondo recibirá propuestas de proyectos que podrán ser enviadas tanto a China, como a Brasil o un tercer país, con la condición de que se trate de inversiones en Brasil en las áreas de infraestructura, manufactura, agronegocios y tecnología.
En la ceremonia de firma del convenio, el embajador de China en Brasil, Li Jinzhang, resaltó que el Fondo China-Brasil es producto de un largo trabajo conjunto y reafirma la relación estratégica bilateral.
"Brasil es un país prioritario para la estrategia china de ampliar la capacidad productiva. El Fondo China-Brasil traerá la garantía de un mecanismo financiero para ampliar la cooperación", dijo.
"El Fondo es una manifestación de un nivel más alto de cooperación para los dos países, y creará un nuevo modelo de cooperación financiera. El vínculo entre China y Brasil actualmente está en un proceso de transformación", resaltó el diplomático.
Según el embajador, la iniciativa se inscribe en la estrategia china de ampliar la cooperación en la cadena industrial y en la cadena de valor.
Por su parte, el ministro de Planificación, Diogo Oliveira, subrayó que el Fondo entrará en operación en un momento auspicioso, puesto que la economía brasileña da señales de estar saliendo de la recesión más prolongada de su historia.
"Este lanzamiento se reviste de una importancia particular, porque significa la confirmación de la confianza que existe entre Brasil y China. Ocurre en un momento en que estamos buscando con nuestros socios internacionales apoyo para proyectos de infraestructura, de energía y tecnología", apuntó el funcionario.
Destacó además las características innovadoras del Fondo, en especial en América Latina, puesto que Brasil será el primer país que participará de un fondo de gobernanza conjunta con el país asiático.
Los proyectos que reciban certificado de prioridad por el Consejo Director del Fondo podrán acceder a las fuentes de financiamiento, que serán del lado chino el Clai Fund y del lado brasileño prioritariamente el Banco de Desarrollo Económico y Social (BNDES) y la Caixa Económica Federal.
Los sectores considerados prioritarios son: logística e infraestructura, energía y recursos minerales, tecnologías avanzadas, agricultura, agronegocios, almacenamiento agrícola, manufacturas, servicios digitales, y otros sectores de interés del gobierno brasileño.
El financiamiento será en una relación de 3 por 1, es decir, por cada dólar aportado del lado brasileño, tres serán aportados por la parte china.
El consejo director estará formado, del lado brasileño, por tres viceministros, y del lado chino, por funcionarios de alto rango, entre ellos la autoridad responsable por gestionar las reservas chinas y un representante del Clai Fund.
El Fondo tendrá un valor nocional de 20.000 millones de dólares, siendo 15.000 millones del lado chino y 5.000 millones del lado brasileño, aunque las partes están dispuestas a colocar más recursos dependiendo de las oportunidades que se presenten.
China y Brasil mantienen una Alianza Estratégica Global desde 2012, y China es desde 2009 el mayor socio comercial de Brasil, el principal destino de sus exportaciones y el principal origen de las importaciones, con un importante nivel de existencias de inversiones productivas directas en el país sudamericano.