BERLIN, 27 jul (Xinhua) -- La ministra de Economía y Energía de Alemania, Brigitte Zypries, advirtió hoy sobre los riesgos de una potencial guerra comercial entre la Unión Europea (UE) y Estados Unidos.
Cuando comentó al canal de noticias alemán ARD sobre el anuncio de Washington de nuevas sanciones contra Rusia, señaló que tal resultado "sería muy malo".
Zypries expresó la esperanza de que las sanciones no hayan sido impuestas para dañar a Europa, pero mencionó que "el resultado final de todos modos es que nuestras compañías podrían verse afectadas".
La UE está lista para discutir medidas de represalia, algo que Zypries consideró posible y que está autorizado por la Organización Mundial de Comercio (OMC).
La ministra vagamente aludió a "otras sanciones" que la UE podría adoptar.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó con una mayoría abrumadora un proyecto legislativo que permitirá sanciones económicas más estrictas contra Rusia, Irán y la República Popular Democrática de Corea (RPDC). La ley aún tiene que ser aprobada por el Senado y ser firmada por el presidente Donald Trump para poder ser promulgada.
La industria rusa del petróleo y gas sería afectada particularmente por las medidas, por lo que representantes empresariales alemanes han advertido que la cooperación económica sobre el abasto de energía entre Moscú y Berlín podría estar en peligro.
Volker Treier, jefe de la oficina de comercio internacional de las Cámaras de Industria y Comercio (Deutscher Industrie- und Handelskammertag, DIHK) de Alemania, advirtió que un resultante congelamiento de proyectos de ductos "también afectaría gravemente a la economía alemana".
Treier pidió a la Comisión Europea que demande una aclaración de Washington y evite que las nuevas sanciones de Estados Unidos contra Rusia se apliquen a firmas de diferentes países.
"Sigue la impresión de que Estados Unidos da prioridad a sus propios intereses económicos", añadió Treier, en referencia a la industria de petróleo y gas de Estados Unidos. Las sanciones no fueron coordinadas con la Unión Europea.
El jueves, Gernot Erler, funcionario de la coordinación para la cooperación con Rusia, también expresó su preocupación.
"El rechazo del proyecto Nord Stream II está literalmente incluido en el proyecto legislativo, aunque en realidad toda la cooperación europea-rusa sobre suministro de energía podría ser sancionada, incluido el mantenimiento de los ductos del que depende el suministro de energía de la UE", dijo Erler al diario "Neue Osnabruecker Zeitung".
El Nord Stream II es un proyecto de gasoducto entre Rusia y Alemania bajo el Mar Báltico que se planea suministre gas natural a Europa a partir del 2019.
Erler criticó que el gobierno de Estados Unidos dé prioridad a la exportación de su propia energía para crear empleos en Estados Unidos y fortalecer su política exterior.
"Este tipo de elemento 'Estados Unidos primero' no pertenece a un régimen de sanciones que da valor al interés común compartido por los aliados", comentó Erler.
En contraste con las reacciones negativas expresadas por Alemania ante la perspectiva de nuevas sanciones contra Rusia, el ex líder del Partido Verde, Reinhard Buetikofer, declaró al periódico "Bild" que el Nord Stream II "no es vital económicamente".
Su declaración encontró el apoyo de Claudia Kemfert, directora de la división de Energía del Instituto Alemán para Investigación Económica (DIW).
"El Nord Stream II no es necesario para el suministro de energía alemán", dijo Kemfert al "Bild".