VIÑA DEL MAR, Chile, 7 sep (Xinhua) -- La Tercera Reunión Ministerial de Alianza de Energía y Clima de las Américas (ECPA, por sus siglas en inglés) comenzó hoy en la ciudad de Viña del Mar, unos 130 kilómetros al noroeste de Santiago de Chile.
Esta cita parte con la meta de "definir la transición energética en el continente americano", declaró la presidenta chilena, Michelle Bachelet, en la inauguración del encuentro.
En la reunión ministerial participan ministros y representantes de 32 países del continente americano, a quienes pidió "definir la transición energética" y realizar un "esfuerzo coordinado".
Durante su participación, la mandataria chilena relacionó el cambio climático con el huracán Irma y recordó a los países del Caribe afectados por el paso del huracán Irma, como Puerto Rico, República Dominicana, Antigua y Barbuda, San Martín y otras pequeñas islas de la región.
"Queremos expresar nuestra solidaridad con los habitantes del Caribe y de Estados Unidos, que atraviesan unas horas muy difíciles por el huracán Irma. Una vez más, estamos ante una de las numerosas alertas que nos envía la naturaleza, cada vez más potente, para que abordemos el ámbito del cambio climático", señaló.
En este sentido, Bachelet hizo una reflexión sobre el hecho de que muchas de las naciones del Caribe sean considerados como países de ingresos medios.
"En mi visita de hace dos semanas por el Caribe, me contaron que cualquiera de estos países pueden entrar en el rango de ingresos medios, pero que cualquier día viene un huracán y destruye su capacidad productiva y sus infraestructuras. El cambio climático influye en todo", agregó.
La mandataria consideró necesario incidir en los pilares que han marcado la hoja de ruta de la ECPA para hacer sostenible el continente, con energía renovable y eficiente, optimización de combustibles fósiles, construcción de infraestructuras energéticas, integración regional de las políticas y una apuesta por la investigación e innovación en ese campo.
Bachelet puso como ejemplo de transformación la energía que Chile saca del desierto de Atacama, el punto que más radiación solar recibe de todo el planeta, donde se han montado decenas de miles de paneles fotovoltaicos.
"Le decimos al resto del mundo que debemos tomar estas rutas modernas. En nuestro país tenemos el sol, pero el resto de naciones también tiene otros enormes recursos naturales", explicó.
En ese sentido exhortó al entendimiento entre los sectores públicos y privados, para que apuesten por la energía sostenible como el denominador común de toda América.
Por su parte, el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, dijo que la transición hacia un nuevo modelo de carburantes no sólo beneficia al medio ambiente, sino que hace "más universal" el acceso de la población a la energía.
"Es inasumible que una región que cuenta con tantos recursos no pueda garantizar energía para todos", resaltó.
Almagro fijó en 30 millones el número de habitantes en el continente americano sin acceso a la energía eléctrica.
"Las Américas tienen un tercio de las reservas de petróleo crudo del planeta. 15 países de la región tienen reservas gas natural. El 60 por ciento de la electricidad se genera gracias a energías renovables, la tasa más alta del mundo. Y Estados Unidos y Brasil producen el 80 por ciento de los biocombustibles del mundo", subrayó.
El ministro chileno de Energía de Chile, Andrés Rebolledo, hizo hincapié en la necesidad de que el continente americano lidere la tendencia mundial de invertir en una energía limpia y moderna.
La ECPA es una cooperación hemisférica que surgió de la V Cumbre de las Américas celebrada en 2009 en Trinidad y Tobago, con el objetivo de desarrollar iniciativas para promover la energía limpia, avanzar en la lucha contra la pobreza energética y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Previo a la reunión en Chile se celebraron dos ediciones, la primera en Washington, Estados Unidos, en 2010, y la segunda en la ciudad mexicana de Mérida, en 2015.