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Medidas de Trump son "serio retroceso" en nexos bilaterales, afirma Cuba

LA HABANA, 8 nov (Xinhua) -- El ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex) de Cuba condenó este miércoles las nuevas medidas de Estados Unidos contra la isla, las cuales -dijo- confirman el "serio retroceso" en los nexos entre ambos países.

"Las medidas confirman el serio retroceso que ha tenido lugar en las relaciones bilaterales, como resultado de las decisiones adoptadas por el gobierno del presidente Donald Trump", señaló una declaración oficial de la cancillería cubana.

Entre las regulaciones que entrarán en vigor este 9 de noviembre figura la prohibición de transacciones financieras con numerosas entidades de la nación caribeña como hoteles y agencias de turismo, así como los viajes de intercambio "pueblo a pueblo" que no tengan carácter académico, precisa el texto, publicado en el portal digital www.cubaminrex.cu.

Al referirse a la "lista arbitraria" hecha por la administración Trump, que incluye a 179 entidades cubanas con las cuales quedan prohibidas las transacciones financieras directas de entidades y ciudadanos estadounidenses, Cuba denunció que se trata de un recrudecimiento del bloqueo.

El listado prohibitivo incluye a la Zona Económica de Desarrollo del Mariel (ZED), puntera de las inversiones extranjeras en la isla; las Terminales de Contenedores de ese puerto y La Habana, decenas de hoteles en toda Cuba, agencias de viajes, tiendas, y hasta marcas de refrescos y rones, y el servicio de fotografía PhotoService, destaca el Minrex.

La declaración de La Habana afirma que estas regulaciones dañarán a la economía cubana y a sus sectores estatal y no estatal, y también a los empresarios de Estados Unidos, que perderán interesantes oportunidades de negocios existentes hoy en Cuba, frente a su competencia.

Las nuevas disposiciones de Washington prohíben las visitas individuales de los ciudadanos estadounidenses a la isla bajo la categoría de intercambios "pueblo a pueblo", e imponen condiciones a los viajes educacionales, y en ambos casos tendrán que hacerse bajo supervisión estadounidense, lo cual -dice Cuba- incrementa las trabas a esos viajes.

Esas regulaciones -añade- dañarán a los ciudadanos estadounidenses, "cuyo derecho a viajar a Cuba, único país en el mundo que no pueden visitar libremente, se verá más restringido aún".

En cambio, Washington permitirá viajes a la ínsula para apoyar a los que califica de sociedad civil, y promover la independencia de esos del Estado cubano, lo cual, señala la Cancillería de la isla, muestra "su trasfondo subversivo".

Estas decisiones del gobierno de Trump son interpretadas en la isla como serias trabas en los esfuerzos hechos por Cuba y por la anterior administración norteña, de Barack Obama, en pos de la normalización de las relaciones entre ambos países.