YUBA, 15 nov (Xinhua) -- Una relativa calma retornó a Yuba, capital de Sudán del Sur, después de un enfrentamiento de una semana entre soldados y guardaespaldas del ex jefe del ejército Paul Malong.
El enfrentamiento empezó después de que los guardaespaldas del ex jefe del ejército, destituido en mayo y puesto bajo arresto domiciliario, se negaron a deponer sus armas.
Sin embargo, después de que las tropas y vehículos blindados que rodeaban la casa de Malong se retiraron el fin de semana, la normalidad retornó a la ciudad y los negocios funcionan como es costumbre.
El enfrentamiento entre soldados del Ejército Popular de Liberación de Sudán (EPLS) y los guardaespaldas del ex jefe del ejército generaron temores de nueva violencia en el país del este de Africa.
El vocero presidencial, Ateny Wek Ateny, dijo a Xinhua hoy que el malentendido se resolvió y que el ex jefe del ejército ahora es libre para viajar a cualquier país de su elección.
Antes de ser destituido por el presidente Salva Kiir en mayo, Malong era ampliamente considerado como el aliado más cercano de Kiir, y movilizó una milicia étnica para luchar en favor de la administración de Kiir.
Grupos de derechos humanos en varias ocasiones acusaron a Malong y a su milicia de cometer atrocidades contra civiles en el país, acusaciones que él negó.
El ex jefe del ejército y otros dos funcionarios del gobierno de Sudán del Sur fueron sancionados por Estados Unidos en septiembre y por Canadá a principios de este mes, por presunta obstrucción de los esfuerzos de paz y por beneficiarse de la actual guerra civil.
La Organización de las Naciones Unidas calcula que alrededor de 4 millones de sursudaneses han sido desplazados interna y externamente.