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Perfil: Renato Gaucho se convierte en el primer brasileño a conquistar la Libertadores como jugador y técnico

RIO DE JANEIRO, 29 nov (Xinhua) -- Al comandar este miércoles la conquista de la Copa Libertadores de América 2017 del Gremio de Porto Alegre, con la victoria por 1-2 sobre el Lanús argentino, Renato Portaluppi, más conocido como Renato "Gaucho' se convirtió en el primer brasileño a alzarse con el título del principal torneo de América, como jugador y como técnico.

Con el triunfo de visita en la revancha de la final que dio al Gremio su tercera Libertadores, tras un ayuno desde 1995, Gaucho, que se coronó en 1983 como campeón del torneo y de la Copa Internacional en la que fue el autor de los dos goles en el triunfo por 2-1 ante el Hamburgo alemán en Tokio, justificó la idolatría que los aficionados del tricolor de Porto Alegre dedican al que consideran como el mayor ídolo de su historia.

La conquista además le hizo ingresar en el selecto grupo de los futbolistas sudamericanos que lograron la misma hazaña, integrado hasta hoy por siete nombres: los argentinos Humberto Maschio (Racing e Independiente), Roberto Ferreiro (Independiente), José Omar Pastoriza (Independiente), Nery Pumpido (River Plate y Olimpia de Paraguay) y Marcelo Gallardo (River Plate) y los uruguayos Luis Cubilla (Peñarol/Nacional de Uruguay y Olimpia de Paraguay), Juan Martín Mujica (Nacional de Uruguay).

El técnico, que lloró tras el pitido final del partido disputado en la noche de este miércoles en el estadio La Fortaleza', del Lanús, sólo pudo decir dos palabras al ser entrevistado en la cancha por la televisión brasileña "Mucha felicidad".

Luego de saludar a los cerca de 5.000 hinchas que fueron a Argentina acompañar el equipo, Portaluppi, que también fue elegido el mejor técnico del torneo, dejó discretamente el césped mientras sus pupilos festejaban a lo grande el título y las conquistas de mejor jugador del partido, para Arthur, mejor jugador de la Libertadores para Luan.

Sin embargo, en la conferencia de prensa tras el partido, recuperó la lengua y su estilo y 'decretó' día festivo en Porto Alegre para el jueves , cuando la delegación regresará a la ciudad .

"Quiero hablar al alcalde de Porto Alegre, señor Marchezan. Mis disculpas, Usted es una autoridad pero

Yo, Renato Portaluppi, estoy decretando día festivo en Porto Alegre, este jueves. Estoy seguro que el alcalde atenderá nuestro pedido porque todos están hablando que Gremio es el campeón de América. Vamos festejar con mucha energía, pero sin violencia", dijo en tono de broma.

Anunció además, que iba a quedar tres días descansando, festejando con su familia y amigos.

Goleador, Renato Gaucho actuó como jugador por 17 años y además del Gremio, es ídolo del Fluminense. también vistió la camisa de la selección brasileña y colgó sus botas en 1999 para empezar un año después su carrera como entrenador en la que dirigió al Fluminense en cinco ocasiones y está en su tercer paso por el Gremio , además de pasar también por Vasco da Gama ,Bahía y Atlético Paranaense.

A los 55 años, Gaucho volvió a comandar al Gremio el año pasado, tras haber quedado lejos de los banquillos por cerca de dos años ,siendo considerado por muchos como alguien que había cerrado la carrera.

Sin embargo, probó que estaban equivocados: llevó el Gremio a la conquista de la Copa de Brasil, que clasificó el equipo para la disputa de esta Libertadores

Preguntado por los periodistas, dijo en la conferencia de prensa que espera ahora que el club le haga la estatua que pidió antes de conseguir el título.

Esta podría haber sido la segunda Libertadores lograda por Renato Gaucho como entrenador, ya que en 2008, como técnico del Fluminense, llevó el equipo a la final ante la ecuatoriana LDU.

Tras perder por 4-2 en la ida ,en Quito, venció por remontada 3-1 en el Maracaná, llevando la decisión a los penaltis , cuando los tres destaques del equipo, el argentino Conca, Thiago Neves y Washington desperdiciaron sus disparos.

Para los analistas deportivos, Portaluppi se ha convertido en uno de los principales técnicos del país y la conquista de esta Libertadores fue atribuida en gran parte a su capacidad de "tener el elenco en las manos" y de adoptar una estrategia que le posibilitó al equipo juntar eficiencia al "futbol bonito" y de presentar hoy, en el primer tiempo "el mejor futbol jugado por un equipo brasileño en los últimos años".