MONTREAL, 23 ene (Xinhua) -- La sexta ronda de renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) inició hoy en Montreal en medio de la incertidumbre por los resultados.
Los canadienses expresaron su preocupación por la posible retirada de Estados Unidos del tratado firmado por Canadá, México y Estados Unidos que entró en vigor el 1 de enero de 1994.
Se considera que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, podría aprovechar esta ronda para anunciar la activación de la cláusula de retirada del TLCAN después de seis meses de notificarlo o que como sugirió que podría esperar las elecciones del 1 de julio en México las conversaciones sigan en incertidumbre.
La ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland, dijo que su país está "listo para cualquier cosa" en la sexta y penúltima ronda de renegociación del TLCAN.
En una entrevista con Question Period de CTV transmitida el domingo, Freeland dijo que los negociadores canadienses no consideran amenazas vacías las constantes advertencias del presidente Trump sobre retirar a su país del acuerdo comercial.
Algunos asuntos polémicos que siguen en la mesa incluyen elevar el contenido de origen de las autopartes. Aunque existen puntos de conflicto, Freeland dijo que no hay razón para no lograr avances en la sexta ronda.
"En estas negociaciones, incluyendo la próxima ronda en Montreal, hemos mantenido un espíritu de buena voluntad e intención positiva. Trabajaremos arduamente para conseguir un resultado positivo. Creemos que es realmente posible", dijo Freeland.
"Y creemos que eso será el mejor resultado no sólo para los canadienses, sino también para los estadounidenses y los mexicanos", añadió la ministra.
Freeland dijo que Canadá sólo puede preocuparse por poner en orden su casa y que, en última instancia, Estados Unidos tomará su propia decisión respecto del futuro del TLCAN.
Sin embargo, Freeland añadió que Canadá planteará propuestas "creativas" en las conversaciones de Montreal. Se desconoce si la ministra hace referencia al controvertido capítulo 11 de solución de disputas entre inversionistas y Estados.