Apple admite su boicot contra los iPhones antiguos
Califonia,26/12/2017(El Pueblo en Línea)- Apple ha entonado el mea culpa y ha admitido que ralentiza sus iPhones más antiguos de manera voluntaria. Ellos se justifican y aseguran que su decisión tiene una razón de peso: optimizar la vida de los viejos aparatos y protegerlos para alargar su recorrido. Pero su confesión, lejos de ser entendida por los consumidores de la manzana más rentable del mercado, ha generado un auténtico incendio en todo el mundo, destaca La Voz de Galicia.
La obsolescencia programada pende sobre la imagen de los de Cupertino, a los que esta estrategia no les ha sentado nada bien. Tras un sinfín de quejas por parte de varios usuarios, que escribían a la compañía de Tim Cook para dejar constancia de que sus iPhone iban cada vez más y más lentos, la firma de la manzana tuvo que admitir que las sospechas eran realidad. Apple admitía que de manera voluntaria había decidido que sus dispositivos fueran más lentos para tratar de prolongar su vida. La firma americana ha querido explicarse y ha asegurado que las baterías de ion litio son «menos capaces de responder a los picos de actividad» cuando hace frío, cuando la carga de la batería está baja o porque el terminal está envejeciendo. Y eso tiene sus consecuencias, porque los smartphones de Apple pueden llegar a «apagarse de forma inesperada» para proteger los componentes electrónicos.
«El año pasado, sacamos una funcionalidad para el iPhone 6, el iPhone 6S y el iPhone SE destinada a suavizar esos picos solo cuando es necesario, de forma que se pueda evitar que el teléfono se apague repentinamente», indicaba la compañía.
Según los expertos en los dispositivos de la manzana, una de las mejores soluciones para evitar el problema sería cambiar la batería. Apple lo hace gratuitamente si el aparato está en el período de garantía, pero en caso contrario la broma supone un desembolso de 79 dólares.
La revelación de Apple pone fin a muchos años de rumorología entre las cabeceras especializadas en el tema. En los últimos tiempos era habitual ver en revistas duchas en el tema tecnológico, experimentos que demostraban cómo teléfonos antiguos sufrían una importante ralentización en su funcionamiento.
Sin embargo, el punto de vista de los usuarios está algo alejado de la versión oficial.
Los consumidores habituales de Apple creen que esta estrategia está destinada a impulsar a los consumidores hacia la compra compulsiva cada año de los últimos modelos que va sacando la firma al mercado, una opción no apta para todos los bolsillos.