Ex presidente brasileño Lula denuncia "persecución política" en su contra

Actualizado a las 28/01/2018 - 15:40

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RIO DE JANEIRO, 27 ene (Xinhua) -- El ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo hoy ser "víctima" de una "persecución política" a manos de la elite del país, tras ser condenado el pasado miércoles en segunda instancia a 12 años y un mes de prisión por corrupción.

Lula, de 72 años, entregó el viernes su pasaporte a la justicia, lo cual le impidió partir a Etiopía, donde estaba prevista su participación en una conferencia de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) sobre la lucha contra el hambre.

El ex mandatario, quien lidera en las encuestas las intenciones de voto, difundió un video en el que aseguró que no quieren que aspire a las elecciones generales de octubre.

"No tiene límites la cantidad de mentiras y la desfachatez para intentar impedir que vuelva a gobernar", declaró Lula, al afirmar que es "condenado por las cosas buenas que hubo en Brasil" mientras gobernó (2003-2010).

"Vean qué absurdo. Estaba con mi maleta ya lista para viajar", pero "un juez ordenó que bloquearan mi pasaporte", señaló Lula.

"Saben que si soy candidato contra los medios de comunicación y la elite, mi posibilidad de ganar las elecciones es total. Y saben que, si gano, los pobres otra vez participarán en el crecimiento de la economía, tendrán salario, renta y el derecho a vivir dignamente, como vivieron durante mi gobierno", agregó.

El ex presidente, quien tiene otras seis causas abiertas en la justicia por presunta corrupción, consideró que Brasil vive "un clima de terror", parecido a "una dictadura", desde la destitución en mayo de 2016 de su predecesora en el cargo y ahijada política, Dilma Rousseff, quien en su opinión "fue víctima de un golpe parlamentario".

En el video, Lula pidió "más paz y mucha democracia en el mundo para discutir una mejor distribución de la riqueza" y garantizar que las personas más pobres puedan "desayunar, almorzar y cenar", algo que según él, se está perdiendo en Brasil desde la destitución de Rousseff.

"Por eso que no quieren que sea candidato, pero saben que, cuanto más me denuncian y más me persiguen, más subo en las encuestas", añadió el ex mandatario.