RIO DE JANEIRO, 11 may (Xinhua) -- La Justicia electoral brasileña negó hoy una petición del ex gobernante Partido de los Trabajadores (PT) para que el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), preso desde el mes pasado y que lidera la intención de voto de cara a los comicios de octubre, esté representado en los debates y entrevistas electorales.
El juez del Tribunal Superior Electoral (TSE), Og Fernandes, negó la petición del PT de conceder una medida cautelar para garantizar un representante de Lula en las entrevistas a los precandidatos a la Presidencia brasileña y en los debates electorales.
Lula fue preso el pasado 7 de abril para cumplir una pena de 12 años y un mes de prisión por corrupción activa y lavado de dinero en el marco del caso Petrobras.
Pese a estar preso, lo que lo inhabilita para las elecciones, Lula y el PT reiteran que es el único candidato de la formación para los comicios de octubre. El PT ya ha afirmado que inscribirá a Lula como su candidato a las elecciones.
Varios medios de comunicación brasileños empezaron a realizar entrevistas a los precandidatos a las elecciones del 7 de octubre, por lo que el PT solicitó que Lula pudiera estar representado y no quedar fuera del público, alegando que mientras el ex mandatario esté en prisión, tiene derecho a recibir el mismo tratamiento que todos los demás aspirantes.
En su decisión. Fernandes reconoció la importancia de la igualdad entre todos los partidos y candidatos, pero resaltó que no existe ningún dispositivo legal que garantice la participación de un representante en la hipotética imposibilidad de participación de algún candidato.
El juez admitió que no hay precedentes sobre una petición similar y que, por ello, el caso será estudiado en el plenario del TSE.
Mientras no ocurra, Fernandes entendió que no hay urgencia para aceptar la medida cautelar, porque "el hecho de que el ciclo de entrevistas ya haya empezado no impide que, en caso de procedencia de esta representación, se garantice a la formación el derecho de indicar a alguien para ser entrevistado en lugar de su precandidato".
Lula fue condenado a prisión acusado de haber recibido un apartamento de la constructora OAS en el litoral del estado de Sao Paulo a cambio de favorecer a la empresa en contratos con la estatal Petrobras, algo que el ex presidente rechaza.