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Brasil pide respeto a sentencias sobre Lula

RIO DE JANEIRO, 17 may (Xinhua) -- El gobierno de Brasil pidió hoy "respeto" a las sentencias de la justicia brasileña tras las críticas expresadas por una serie de ex líderes europeos por la prisión del ex mandatario Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010).

En una teleconferencia con periodistas, el ministro de la Casa Civil (gabinete) de Brasil, Eliseu Padilha, aseguró que el gobierno brasileño respeta "la división de poderes, y si el Poder Judicial decide, nosotros no lo discutimos y entendemos que todos los Estados soberanos deben respetarlo también".

Asimismo, Padilha aseguró que "el tema del ex presidente Lula es dictado por el Poder Judicial", y abundó que al gobierno brasileño como "a los otros Estados soberanos sólo les cabe respetarlo".

Las palabras de Padilha respondieron al manifiesto denominado "Llamada de líderes europeos en apoyo a Lula", divulgado el pasado martes y firmado por seis ex jefes de Estado y de Gobierno europeos en apoyo al ex mandatario brasileño.

El documento fue firmado por el español José Luis Rodríguez Zapatero, el francés François Hollande, los italianos Massimo D'Alema, Romano Prodi y Enrico Letta y el belga Elio di Rupo.

"La lucha legítima y necesaria contra la corrupción no puede justificar una operación que cuestiona los principios de la democracia y el derecho de los pueblos de elegir a sus gobernantes", subraya la carta rubricada por los ex líderes europeos.

El primero en responder el manifiesto fue el canciller brasileño Aloysio Nunes, quien afirmó que "cualquier ciudadano brasileño que haya sido condenado en un órgano colegiado queda inhabilitado para disputar elecciones".

Nunes destacó que "al sugerir que se haga una excepción al ex presidente Lula, esos señores predican la violación del Estado de derecho", y afirmó que "más que escamotear la verdad, cometen un gesto preconcebido, arrogante y anacrónico contra la sociedad brasileña y su compromiso con la ley y las instituciones democráticas".

Lula fue detenido el pasado 7 de abril para cumplir una condena a 12 años y un mes de prisión por corrupción activa y lavado de dinero, en el marco de la red de corrupción en torno a la petrolera brasileña Petrobras.

El ex mandatario fue condenado bajo la acusación de haber recibido un departamento triplex en la ciudad de Guarujá, Sao Paulo, de la constructora OAS, a cambio de favorecerla en contratos con Petrobras, acusaciones que el ex mandatario niega.

El ex presidente brasileño y líder del Partido de los Trabajadores (PT) lidera las encuestas de intención de voto para las próximas elecciones presidenciales, en todos los escenarios en los cuales es incluido, por un amplio margen sobre sus principales adversarios.

No obstante, según la ley brasileña, cualquier persona condenada en segunda instancia, como fue el caso de Lula, está descartada para postularse a un cargo público.