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Cuba busca su quinta final consecutiva en Serie Mundial de Boxeo

LA HABANA, 24 may (Xinhua) -- La franquicia Domadores de Cuba enfrentará este viernes en La Habana a los Gallos de Pelea de Francia, en el tope de semifinales correspondiente a la VIII Serie Mundial de Boxeo (WSB, por sus siglas en inglés).

El coliseo de la Ciudad Deportiva, habitual sede de estos enfrentamientos y con aforo para 7.000 aficionados, acogerá el cartel nocturno que de seguro devendrá una dura porfía por acceder a la gran final.

En esta ocasión, la cartelera en la capital cubana incluye el formato C-1, que comprende las categorías de 49, 56, 64, 75 y 91 kilogramos.

Cuba, finalista en sus cuatro incursiones anteriores en la WSB y con dos coronas en 2014 y 2016, saldrá en busca de al menos tres victorias para completar un 6-4 global que le garantice el ansiado boleto.

Con ese objetivo, el entrenador Rolando Acebal convocó a sus principales estrellas de la modalidad de turno, como los monarcas olímpicos Robeisy Ramírez (56) y Arlen López (75) y los titulares mundiales Andy Cruz (64) y Erislandy Savón (91).

Completa la selecta nómina el campeón antillano Damián Arce (49), el de menos experiencia en estas lides (dos peleas, ambas con éxito).

Francia, entretanto, uno de los elencos sorpresa de esta edición, contará con tres púgiles profesionales: Morgan N' Dong (64, de origen gabonés), Martin Owuno (75) y Sylvain "El Loco" Luce (91), lo cual ha despertado grandes expectativas en la afición.

Los tres representantes del boxeo rentado "depararán sorpresas", auguró el técnico de la selección gala, Brahim Aslouh, campeón olímpico de Sydney-2000 en los 48 kg.

Tras el pesaje oficial de los integrantes de ambas escuadras, Aslouh expresó que necesitaban boxeadores profesionales para dominar a los cubanos y que confían en vencer 4-1 a los subcampeones de la pasada edición.

Serán tres combates entre profesionales, pero sin desempeños en series mundiales, y hombres de excelso palmarés como son Cruz (14-0), López (18-7) y Savón (27-3).

No menos interesante resultaría el pleito en los minimoscas, pues tanto Arce como el refuerzo español Samuel Carmona, quinto lugar olímpico en Río de Janeiro-2016 y número uno del ranking del evento, se caracterizan por ser pegadores incesantes.

Otro tanto ocurriría en los 56 kilogramos entre Ramírez, bicampeón en juegos estivales, y Samuel Kistohurry, líder del listado de la actual WSB.

Para poder llegar a la discusión de las medallas de oro, los visitantes están obligados a imponerse por ese marcador un 5-0, algo que a priori parece improbable, pues en la primera fase de semifinales, celebrada en la sala Wagram de París, cayeron 2-3.

En la cita parisina, Cuba se impuso por intermedio de Roniel Iglesias (69 kg), Julio César la Cruz (81) y José Angel Larduet (más de 91 kg), en tanto Francia disfrutó las victorias del apoyo español Gabriel Escobar (52) y el campeón mundial de Hamburgo 2017, Sofiane Oumiha, quien volvió a superar al tricampeón del orbe Lázaro Alvarez

Si en La Habana los galos obtuvieran tres éxitos, habrán ganado la velada pero hasta ahí, porque habrían igualado el match global a cinco triunfos pero viajaron a la isla sin el welter llamado a deshacer un posible empate.

Sin embargo, Acebal se mostró optimista y aseveró que sus discípulos "están en condiciones de ganar las cinco peleas".

A favor de los cubanos se podría añadir que en el coliseo de la Ciudad Deportiva los púgiles de casa son casi invencibles, pues allí no pierden desde el 10 de abril de 2015, y de 150 combates celebrados, han ganado 146.

En la otra semifinal, los Astaná Arlans, de Kazajstán, marchan delante 3-2 frente a Corazones de León, del Reino Unido, y el vencedor se definirá el sábado en suelo kazajo.

De ganar definitivamente las representaciones de Cuba y Kazajstán, se reeditarían las finales de 2015 y 2017, que en ambos casos favoreció a los tricampeones europeos.