Beijing, 05/06/2018 (El Pueblo en Línea) - Con el objetivo de frenar el calentamiento de la economía en el sector, China emitió nuevas reglas para las subvenciones e inversión en la industria de la energía fotovoltaica, afirmaron este domingo varios analistas chinos, después de que tres autoridades gubernamentales emitieran nuevas políticas vinculadas al tema.
La Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, el Ministerio de Finanzas y la Administración Nacional de la Energía anunciaron un recorte de 0,05 renminbi ($0,008) por kilovatio-hora en la red energética nacional y una reducción de la misma cantidad en los subsidios entregados a la energía generada por plantas fotovoltaicas.
Estos cambios no afectan los subsidios a nivel de condado para proyectos fotovoltaicos que estén orientados a la mitigación de la pobreza.
Como resultado, ahora las tarifas de la red eléctrica nacional oscilarán entre los 0,5 y 0,7 renminbi por kilovatio-hora.
Algunos medios de comunicación señalaron que esta política es la más austera que se ha vivido en años e indica una reversión más profunda de los subsidios otorgados al sector chino de la energía fotovoltaica.
Lin Boqiang, director del Centro Chino de Investigaciones Económicas para Energía de la Universidad de Xiamen, considera que la política va a frenar el rápido crecimiento de las plantas de energía fotovoltaica, en medio de los esfuerzos desplegados por el gobierno central para bajar el costo de la electricidad que pagan los consumidores residenciales.
"Este año, en el Informe sobre la Labor del Gobierno se estipula claramente que este año los precios de la electricidad se reducirán en un 10 por ciento. La subvención proviene del alza continua en el pasado de las tarifas de la electricidad, precios que eran pagados por los consumidores residenciales", indicó Lin al diario Global Times.
Y añadió que la necesidad de reducir los precios de la electricidad genera el recorte de las subvenciones al sector de la energía fotovoltaica.
“Debido a que la nueva política apenas acaba de anunciarse, es difícil imaginar cuál será su impacto”, indicó Liu, miembro del departamento de relaciones públicas de Trina Solar, empresa especializada en fabricar paneles solares.
Por su parte, la Asociación de la Industria Fotovoltaica de China publicó este viernes un artículo en su cuenta de Wechat, donde asegura que “aunque el ritmo de crecimiento del sector podría no ser sostenible, la energía fotovoltaica seguirá siendo una fuerza clave en la revolución energética de la nación y seguirá recibiendo el apoyo del Estado”.
La Asociación de la Industria Fotovoltaica de China también manifestó que las instalaciones fotovoltaicas pueden generar energía a un costo menor comparado con otras fuentes. Y agregó que en China la energía fotovoltaica tiene una gran fuerza.
"Dado que los costos de los equipos han disminuido constantemente en los últimos años, es razonable que el subsidio también disminuya. La reducción es leve, pero inesperada." aclaró Lin, indicando que hay muchas plantas fotovoltaicas que aún están en construcción.
Segundo factor: el excedente
“Un segundo factor es el excedente en la producción de electricidad destinada al consumo residencial, aunque es una razón secundaria en la decisión de adoptar la nueva política”, agregó Lin. “La remuneración por suministro no es sostenible”.
De acuerdo al sitio chino de noticias guacha.cn, a finales del 2017 la subvención a la energía renovable había alcanzado los 100 millones de renminbi.
En 2017, las principales centrales de energía de la nación trabajaron un total de 3.786 horas, reduciendo 11 horas de trabajo a partir del 2016, informó la Administración Nacional de la Energía.
En su concepción global de desarrollo, China está tomando la delantera en energía fotovoltaica al crear un sistema internacionalmente competitivo y una cadena industrial completa, aseguró la agencia de noticias Xinhua este fin de semana. Para el 2020, bajo el plan de energía renovable 2016-20, el gobierno central ha planificado que el 27 por ciento del total de la generación de energía será producida desde fuentes de energía renovables.
Lin puntualizó que el excedente en el mercado interno alentará a las empresas chinas a buscar oportunidades en el extranjero. Y debido a los fuertes obstáculos para entrar en los mercados de Estados Unidos y la Unión Europea, debido a diversas investigaciones sobre competencia desleal, el impulso chino en ultramar para la expansión en energía fotovoltaica podría centrarse en África y otras regiones de la iniciativa “Cinturón y Ruta”.
“Aunque en los últimos años, la dependencia de las empresas chinas con respecto a los mercados de la Unión Europea y los Estados Unidos se ha reducido significativamente”, acotó Lin.