Descubren en México el primer templo dedicado a “nuestro señor desollado” |
Ciudad de México,04/01/2019(El Pueblo en Línea)-El Instituto Nacional de Antropología e Historia de México informó sobre el primer templo en honor a la deidad prehispánica, vinculada a la fertilidad, los ciclos agrícolas y la guerra, destaca RT.
Investigadores mexicanos descubrieron el primer templo dedicado a Xipe Tótec, un antiguo dios mesoamericano, en una zona arqueológica de Puebla, México.
Xipe Tótec, conocido como “nuestro señor desollado”, era uno de los dioses más importantes de la época prehispánica, cuya influencia abarcaba temas como la fertilidad, la regeneración de los ciclos agrícolas y la guerra. A pesar de ser reconocido por numerosas culturas, nunca se había encontrado un templo asociado directamente a su culto.
Por eso destaca el descubrimiento de dos altares de sacrificio, tres esculturas en piedra y diversos elementos arquitectónicos, localizados en la zona arqueológica de Ndachjian–Tehuacán, en el estado de Puebla, los cuales confirman que esta antigua ciudad resguarda al primer templo dedicado a este dios descarnado.
En el sitio arqueológico se encontraron esculturas que representan dos cráneos desollados y un torso cubierto con piel de sacrificio, personificación de Xipe Tótec.
También en el sitio de excavación se encontró un cubo adicional con pigmento rojo, el segundo de los cráneos de piedra y el citado torso esculpido de Xipe Tótec, el cual estaba fragmentado tras ser utilizado en un ritual, por lo que no se descarta que en el futuro pueda hallarse la cabeza, el brazo derecho y los pies (como ha sucedido con otras representaciones de esta deidad descubiertas en el área).
De acuerdo al Instituto Nacional de Antropología e Historia de México, una de las fiestas más importantes del México antiguo era el Tlacaxipehualiztli, palabra que en la lengua náhuatl significa "ponerse la piel del desollado".
Dicha celebración se efectuaba comúnmente en dos altares circulares. En el primero se sacrificaba a personas capturadas en combate. Y en el segundo se realizaba el desollamiento para glorificar a Xipe Tótec, un proceso en el que los sacerdotes se ataviaban con la piel del individuo, la cual depositaban ulteriormente en pequeños hoyos hechos en las explanadas, frente a los altares.