Por Qin Ning
Beijing, 22/01/2019(El Pueblo en Línea) - Después de usarlo dos veces, descubrí que se caía la pintura de las asas. Cuando lo pegué a mi cuerpo, la camisa se manchó también de algo negro... Según informan, el señor Wang de Hangzhou compró un bolso de Louis Vuitton y tuvo muchos problemas con el producto. La explicación dada al señor Wang por la sede de Louis Vuitton en Shanghai lo dejó atónito. La empresa le pidió que usara menos camisas blancas y vistiera más ropa negra para que no se notase la pérdida de color en el bolso. En cuanto a la pintura de las asas, el problema está en el clima, ya que el nivel de humedad en China es demasiado alto ...
La sede de Louis Vuitton en Shanghai culpa al clima de China por el problema de la pintura en las asas del bolso, y la gente no ha tardado en idear una nueva palabra de moda en internet. Resulta que la calidad de los bolsos de una marca de alta gama como Louis Vuitton no en tan buena.
Si la pérdida de color se debe a un problema de calidad en el producto de Louis Vuitton, entonces la respuesta de la empresa refleja una falta de ética profesional básica. Los miembros del personal de la sede de Louis Vuitton en Shanghai no deben mostrar una imagen individual, sino una corporativa. Una justificación irresponsable, además de dañar a los consumidores, también daña la imagen de la marca y muestra al público un sentido de falta de ética empresarial y una falta de respeto hacia los consumidores por parte de Louis Vuitton.
Lo más importante es que no se ha hecho un autoexamen o una autorreflexión sobre el problema y simplemente se ha buscado una causa exterior, en este caso el clima de China. Disculpe, ¿otros productos de lujo muestran problemas similares? Si el clima afecta al producto, ¿por qué sigue realizando una venta de tan alto perfil?
Como una de las marcas de lujo más exitosas que operan en China, Louis Vuitton Group ha generado muchas ganancias. Mientras gana mucho valor, ¿ha creado una buena imagen corporativa, o demuestra responsabilidad corporativa? Como empresa con experiencia en la venta de artículos de lujo, Louis Vuitton se distribuye ampliamente en China, pero cuando llegan los problemas, ya sea la discriminación de precios o problemas de calidad, la crítica también llega. ¿Dónde está el problema?
No importa cómo de larga sea la historia de un grupo de lujo, si la calidad no es la adecuada, los consumidores no dudarán en dejar la marca de lado. La razón es que los consumidores chinos se están volviendo cada vez más maduros, ya no persiguen simplemente la adquisición de bienes de lujo. Los consumidores chinos se están volviendo cada vez más racionales y exigen la correspondiente dignidad del consumidor. Las tiendas que intimiden o culpen al comprador de tener un comportamiento arrogante están destinadas al fracaso.
Según las últimas noticias, el afectado ha publicado en la red social Weibo lo siguiente: "La sede de Louis Vuitton acaba de llamarme y ha acordado cambiarme el bolso por uno nuevo ... Louis Vuitton, puedes esconder esa cara de orgullo cuando quieras y ganar dinero de los consumidores chinos, pero no puedes menospreciar a los consumidores chinos. El mercado votará con los pies, al menos yo nunca entraré en esa tienda de nuevo". Si esto es cierto, parece indicar que la sede de Louis Vuitton en Shanghai está intentando corregir su error. La pregunta es, ¿cuánta sinceridad hay en esta corrección? Sin un examen de la opinión pública ¿puede Louis Vuitton Group responder de esta manera?
Aún se debe observar cómo terminará la disputa entre el señor Wang y la sede de Louis Vuitton en Shanghai. Puede haber algunos detalles que deberían eliminarse y muchos problemas que deberían analizarse. Sin embargo, se puede confirmar que la respuesta de la sede de Louis Vuitton en Shanghai no ha sido acertada, y no solo no convence al afectado, sino que tampoco convence al público. Este incidente no es una "competición" entre un consumidor y una compañía de artículos de lujo, sino un asunto que incumbe a todos con un tema público que recuerda a las autoridades reguladoras que deben intervenir a tiempo, recordando a las compañías de artículos de lujo relevantes que sean amables con los consumidores y recordando que ocurra lo que ocurra, las empresas deben poner a los consumidores en primer lugar.
La cultura es el alma de la marca, y las marcas sin connotación cultural carecen de vitalidad. El proceso de crecimiento de una marca es un proceso de actualización tecnológica, un proceso de mejora de la calidad y un proceso de responsabilidad corporativa. Establecer una marca no es fácil, requiere un proceso largo y arduo, además de una continua infiltración de la cultura y el esfuerzo de una generación o incluso generaciones, pero si no se maneja adecuadamente, puede ser destruida. Por lo tanto, se espera que más compañías de lujo realmente respeten a los consumidores, creando una marca que sea conocida y con una larga trayectoria en este sentido.