BEIJING, 14 abr (Xinhua) -- Más del 60 por ciento de los chinos tiene una actitud crítica con los adultos que optan por vivir con sus padres ancianos y se amparan en el apoyo de estos con el pretexto de brindarles compañía, según una encuesta reciente.
Alrededor del 77 por ciento de los 2.002 interrogados en la encuesta, realizada por el periódico China Youth Daily, dijo estar al corriente de tal práctica en su círculo cercano. Las personas sobre las que se centra el sondeo son adultos que no son estudiantes ni empleados ni están recibiendo capacitación. Comúnmente se les conoce como el acrónimo en inglés NEET, y viven del apoyo de sus padres, que en la mayoría de los casos son ya adultos mayores.
Los habitantes de las llamadas ciudades de segundo nivel, es decir las que siguen inmediatamente a Beijing, Shanghai, Guangzhou y Shenzhen en términos del nivel de desarrollo relativo, son más propensos a hacerlo, ya que, según el informe, la generación posterior a los 80 tiene la mayor frecuencia, seguida de la generación posterior a los 90.
Casi el 63 por ciento de los preguntados sostuvo que no es propio de un buen hijo vivir con sus padres ancianos y depender de ellos con el pretexto de acompañarlos como cuidador. La misma proporción considera que tales acciones reflejan un estilo de vida NEET, así como la reticencia de algunos adultos a trabajar. Cerca del 30,3 por ciento, sin embargo, cree que es un reflejo del estrés de la vida de los jóvenes.
A su vez, más del 50 por ciento manifestó que destinar tiempo a estar con sus padres es una responsabilidad de los hijos adultos, pero que ya no deben gastar el dinero de aquéllos.
En cuanto a las razones detrás de tales prácticas, el 58,2 por ciento de los encuestados culpó a los propios padres por no haber cultivado la autosuficiencia en sus hijos, mientras que el 49,6 por ciento considera que algunos padres están dispuestos a seguir manteniendo a sus hijos adultos para garantizar su compañía.