Algunas de las reliquias culturales destacadas que han sido recientemente repatriadas del Reino Unido. [Foto: proporcionado por la Administración Nacional del Patrimonio Cultural]
Por Wang Kaihao
Beijing, 19/11/2020 (El Pueblo en Línea) -Después de estar en el extranjero durante décadas, 68 reliquias culturales chinas que habían sido llevadas al Reino Unido recientemente fueron devueltas a su tierra natal gracias a los esfuerzos conjuntos de los dos países, indicó este miércoles la Administración Nacional del Patrimonio Cultural durante una conferencia de prensa.
Algunas de las reliquias abarcan milenios, que datan del período de primavera y otoño (770-476 a. C.) hasta la dinastía Qing (1644-1911), y abarcan una variedad de artículos, principalmente cerámica. Son de una variedad de provincias, incluyendo Jiangxi, Anhui, Fujian, Henan, Shaanxi, Hebei y Guizhou.
“Su regreso pone fin a un cuarto de siglo de esfuerzos para lograr la repatriación”, indicó Guan Qiang, subdirector de la Administración Nacional del Patrimonio Cultural.
En febrero de 1995, el Servicio de la Policía Metropolitana de Londres informó a la embajada china en Reino Unido sobre una investigación acerca de una venta de bienes robados que involucraba a un grupo de reliquias culturales que se pensaba eran chinas. El dato fue confirmado por Beijing: eran piezas que fueron sacadas del país mediante acciones de contrabando.
Una placa de cerámica de la dinastía Tang (618-907) entre las reliquias devueltas. [Foto: proporcionada por la Administración Nacional del Patrimonio Cultural]
En una operación efectuada en marzo, la policía británica se apoderó de todas las piezas. De inmediato, el Consejo de Estado creó un grupo especial de trabajo para traerlas a casa.
En 1998, más de 3.000 reliquias fueron devueltas a China después de la cooperación en las unidades policiales, una demanda y negociaciones. Fue la mayor repatriación de reliquias culturales perdidas en la historia de la Nueva China.
Sin embargo, un comprador local de docenas de reliquias similares se negó a participar en las negociaciones, y la disputa civil se prolongó después de llegar a un punto muerto. Las 68 reliquias permanecieron incautadas por la policía británica.
"Pero nunca dejamos de trabajar en el caso y nos mantuvimos en estrecho contacto con la embajada y la parte británica para darle seguimiento", aseguró Guan.
Un par de jarrones de finales del período Yuan (1271-1368) o de la dinastía Ming temprana (1368-1644), que se especula fueron robados de la misma tumba. [Foto: proporcionada por la Administración Nacional del Patrimonio Cultural]
Finalmente apareció una luz en el camino. En enero, la Policía Metropolitana informó a la embajada china de la fecha límite para el procesamiento del caso ya había pasado, pero se desconocía el paradero del comprador. Dada la circunstancia, la policía expresó su voluntad de devolver las piezas a China.
A pesar de los retrasos creados por la pandemia, Yu Peng, ministro consejero de la embajada china, en julio lideró un equipo para revisar el inventario. Quince años atrás, Yu había sido el responsable de contactar por primera vez a la policía británica para hablar de este caso.
En octubre, el Servicio de la Policía Metropolitana entregó las piezas a la embajada china. Liu Xiaoming, embajador chino en Reino Unido, también celebró una ceremonia de entrega en línea justo antes de la partida de las reliquias hacia China.
Grupo de figuras de la dinastía Han (202 a. C. a 220 d. C.). [Foto: proporcionado por la Administración Nacional del Patrimonio Cultural]
Las reliquias fueron transportadas hacia Beijing el 20 de octubre, aunque el proceso se mantuvo en secreto hasta este miércoles.
"Esta acción demostró nuestra determinación para resolver delitos de este tipo y traer de vuelta las reliquias culturales perdidas o robadas que fueron llevadas al extranjero", indicó Guan.
Con las reliquias en China, se organizó un panel de expertos para examinar y valorarlas.
“Están muy bien conservadas y en buena forma", aseguró Deng Chao, director de la oficina de repatriación de reliquias culturales de la Administración Nacional del Patrimonio Cultural. "Muchas de ellas tienen un gran valor para estudios históricos y científicos”.
Deng añadió que hay 13 piezas que han sido clasificadas como tesoro cultural nacional, en el segundo grado más alto. Asimismo, hay 30 piezas que ostentan el tercer grado más alto.
Un caballo de piedra, que se cree proviene de una tumba de la provincia de Guizhou durante el período Yuan o la dinastía Ming. [Foto: proporcionada por la Administración Nacional del Patrimonio Cultural]
Muchas de las reliquias recuperadas eran porcelanas de la dinastía Song (960-1279) de diferentes hornos, lo que refleja una economía en auge y demuestra cómo se habían extendido las técnicas de producción utilizadas en ese momento.
Dos jarrones de cerámica intactos, que datan de las dinastías de finales del período Yuan (1271-1368) y Ming temprano (1368-1644), se cree que provienen de la misma tumba. Basándose en comparaciones con otros descubrimientos arqueológicos, se llegó a la idea de que una rara estatuilla de piedra de un caballo probablemente formó parte del séquito funerario de un jefe local de la provincia de Guizhou.
Un grupo de figuras de bailarines, pertenecientes a la dinastía Han (206 a. C.a. a 220 d. C.) es también una referencia clave para el estudio de la tecnología de fabricación de cerámica de la época.
Todas las reliquias retornadas se exhiben en el porta digital de la Administración Nacional del Patrimonio Cultural de China.
Yu Peng (a la izquierda), ministro consejero de la embajada china en Londres, junto a un colega realiza el inventario de las reliquias culturales, 16 de octubre, Reino Unido. [Foto: proporcionada por la Administración Nacional del Patrimonio Cultural]
Guan resaltó que la repatriación coincide con el 50º aniversario de la Convención de la UNESCO sobre las Medidas para Prohibir e Impedir la Importación, Exportación y Transferencia Ilícitas de Bienes Culturales, comúnmente conocida como la Convención de la UNESCO de 1970. China se unió en 1989.
Precisamente una de las razones por las que la repatriación de las 68 reliquias fue difícil en la década de 1990 reside en la ausencia de una base legal compartida para el proceso. Reino Unido se unió en el 2002 a la Convención de la UNESCO.
"La repatriación de reliquias perdidas no sólo implica problemas legales complejos", recalcó Guan. "También está relacionada con las emociones colectivas y las relaciones internacionales. Como es una cuestión que implica una dificultad compartida, la solución requiere esfuerzos constantes a lo largo de generaciones".
Guan considera que el derecho internacional ha experimentado un cambio histórico en los últimos 20 años y devolver reliquias perdidas a su lugar de origen se está convirtiendo en un consenso mundial.
"Así que este logro alcanzado conjuntamente por China y Reino Unido tiene una importancia global a la hora de proporcionar apoyo ante casos similares", añadió.
Representantes del Servicio de la Policía Metropolitana y de la Embajada de China en Londres firman el documento de entrega de las reliquias, 16 de octubre del 2020. [Foto: proporcionada por la Administración Nacional del Patrimonio Cultural de China]
(Web editor: 周雨, 赵健)