BEIJING, 14 dic (Xinhua) -- China y Japón, cuyas relaciones han enfrentado constantes dificultades por el giro derechista de Japón en los últimos años, llegaron en noviembre pasado a un acuerdo de cuatro puntos. Ahora toca al primer ministro japonés, Shinzo Abe, cumplir sus compromisos.
A continuación las declaraciones de China sobre las principales acciones insensatas de Japón que han afectado las relaciones bilaterales en 2014.
NEGACION DE LA HISTORIA
El 13 de diciembre, el presidente chino, Xi Jinping, aseguró que la negación de la Masacre de Nanjing no será permitida por el pueblo chino y los amantes de la paz y la justicia en el mundo.
La Masacre de Nanjing, cometida por los agresores japoneses, fue una de las tres mayores masacres durante la Segunda Guerra Mundial. Fue un crimen atroz contra la humanidad y una página oscura de la historia de la humanidad, comentó Xi en su discurso en la ceremonia oficial con motivo del primer Día Conmemorativo Nacional por las Víctimas de la Masacre de Nanjing.
"La historia, las almas de las 300.000 víctimas mortales, los 1.300 millones de chinos y todas las personas amantes de la paz y la justicia en el mundo no permitirán que nadie intente negar la masacre", manifestó Xi.
MILITARISMO
El 1 de julio, China urgió a Japón a respetar las preocupaciones de seguridad de los vecinos asiáticos y no perjudicar la soberanía de China y los intereses de seguridad, debido a que Japón aprobó una resolución que permite el aumento de su militarismo en Asia.
La declaración se publicó después que el Gabinete japonés aprobara la resolución que permite a Japón ejercer el denominado "derecho a la autodefensa colectiva" mediante la reinterpretación de su Constitución pacífica, preparando así el camino para que las fuerzas armadas japonesas combatan en el extranjero.
"Urgimos a Japón a que respete seriamente las preocupaciones legítimas sobre la seguridad de sus países vecinos, aborde con total discreción los asuntos relevantes, no perjudique la soberanía nacional y los intereses de seguridad de China o socave la paz y la estabilidad regionales", indicó Hong Lei, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China.
NOMBREMIENTO DE CINCO ISLOTES DE LAS ISLAS DIAOYU
El 1 de agosto, China rechazó la acción de Japón de poner nombre a cinco islotes pertenecientes a las Islas Diaoyu, calificándolo dicho acto de ilegal e inválido.
"China se opone firmemente a la acción de Japón que socava su soberanía territorial porque las Islas Diaoyu y sus islas adyacentes son territorio de China y el país ya les ha dado nombre", declaró Qing Gang, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, a través de un comunicado.
"La medida unilateral de Japón es ilegal e inválida y no puede cambiar el hecho de que las Islas Diaoyu y sus islas adyacentes son parte del territorio de China", apuntó.
VISITAS AL SANTUARIO YASUKUNI
El 15 de agosto, Hua Chunying, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, anunció que China "se opone firmemente" a la ofrenda del primer ministro japonés, Shinzo Abe, y a la visita de miembros del Gabinete nipón al santuario Yasukuni.
"El santuario Yasukuni honra a 14 criminales de guerra de clase A convictos de la Segunda Guerra Mundial y glorifica su historia de agresión", dijo Hua, quien agregó que "la visita y la ofrenda reflejan una vez más la actitud errónea del gobierno japonés hacia los asuntos históricos".
Hua manifestó que sólo cuando Japón confronte y reflexione sobre su historia de invasión y trace una línea ante el militarismo, las relaciones chino-japonesas podrán lograr un desarrollo sano y estable.