El primer ministro chino, Li Keqiang, señaló hoy miércoles que el gobierno ha recortado una tercera parte de los asuntos sujetos a revisiones y aprobaciones administrativas desde 2013.
"Hace tres años, en la misma ocasión, prometí que este mandato del gobierno recortaría en un tercio el número de asuntos que requieren revisiones y aprobaciones del Consejo de Estado; ahora ya hemos cumplido plenamente ese objetivo", manifestó Li en una conferencia de prensa tras la conclusión de la sesión anual del máximo órgano legislativo.
Simplificar la administración y delegar poderes son la clave para transformar las funciones gubernamentales, indicó Li, quien añadió que las evaluaciones por parte de terceros mostraron que la mayoría de las empresas y de las personas están satisfechas con el progreso.
"Todavía existen algunos problemas y nuestro pueblo espera más del gobierno", dijo el primer ministro.
"Este año, estamos resueltos a reducir aún más el número de asuntos sujetos a aprobación gubernamental y dejar más margen al mercado", afirmó Li, que admitió que aún existen muchos requisitos para certificados y permisos y anunció que se reducirán a la mitad este año.
"Los procedimientos innecesarios no solo han afectado a la productividad, sino que también han frenado el consumo", indicó Lin que agregó que el gobierno debe seguir adelante con la reforma.
El primer ministro instó a unificar los estándares existentes. Los documentos gubernamentales sin base legal sólida o que dificulten o perjudiquen los intereses del pueblo deben ser expurgados o derogados.
"La reforma recortará los poderes del gobierno pero estamos empeñados en seguir adelante hasta completarla, porque hacerlo beneficiará rápidamente a nuestro pueblo, aunque el gobierno tenga que hacer reajustes dolorosos", dijo Li.
El primer ministro espera que con este proceso el gobierno ofrezca mejores servicios al pueblo.