El Robin Hood venezolano sigue teniendo muchos seguidores |
Fuente:agencias
Caracas,16/08/2016(El Pueblo en Línea)-La violencia es el signo de las grandes capitales latinoamericanas. El fenómeno no es nuevo, pero ha evolucionado durante más de medio siglo en ciudades como Caracas para dar paso a nuevos símbolos como los "santos malandros", que hacen "milagros" a cambio de ascender en la escala espiritual, reseña RT.
La palabra "chamo", en Venezuela, es sinónimo de joven, de muchacho, aunque se usa con frecuencia para referirse a cualquier persona en tono de excesiva confianza. El Chamo Ismael es uno de los santos más populares. La legión de seguidores crece cada vez más porque "la gente le pide para que le dé seguridad, que los proteja en la calle o para que sus familiares salgan de la cárcel".
El Chamo Ismael es una figura generalmente representada como un hombre con pantalón azul, camisa roja de botones, una pistola adosada al cinturón, lentes de sol y una gorra puesta de medio lado. Las manos, como en la canción Pedro Navaja de Rubén Blades, están siempre en los bolsillos. Un pequeño agujero en la comisura de la imagen de yeso o madera, sugiere que allí, justo allí, debe calzarse un cigarrillo. Se supone que vivió en los años 60, en los albores de la democracia venezolana.
Mucha gente le pide a Ismael, pero la mayoría son ladrones que piden para salir a lanzar un robo.
Pero no sólo es Ismael a quien veneran. La corte malandra está integrada por la malandra Elizabeth, Petróleo Crudo, Isabelita, Machera, el pavo Freddy, Tomasito, Miguelito, El Ratón, Luisito, Luis Sánchez, Pez Gordo, Pedro, Jhonny, Pedro Hilario y William, detalla el documental Pa' santo yo.