BUENOS AIRES, 21 dic (Xinhua) -- El experto argentino Gustavo Girado destacó hoy miércoles la reciente decisión de China de profundizar las reformas estructurales por el lado de la oferta y reforzar la entrada de inversión extranjera en 2017, en el marco de un proceso de apertura de su economía.
En una entrevista exclusiva con Xinhua, Girado, titular de la consultora Asia & Argentina (A&A), destacó que "China ha encarado una serie de políticas diferentes con respecto a la oferta interna que está haciendo de una gran cantidad de manufacturas".
"Eso es consistente con la decisión tomada en la última reunión del G20 (realizada en la ciudad china de Hangzhou), donde el documento, firmado por todos los asistentes y promovido por el presidente Xi Jinping, fue tomar conciencia acerca de la sobreoferta mundial de commodities manufactureros", añadió el economista.
Para Girado, "la nueva política de oferta china que ha manifestado recientemente está en línea con el interés internacional de no permitir que esos precios se reduzcan más, restringiendo la oferta internacional de esos productos".
China continuará avanzando en las reformas estructurales por el lado de la oferta en 2017, indica un comunicado emitido el viernes pasado en Beijing tras la Conferencia Central de Trabajo Económico.
El país asiático buscará progresos sustanciales en cinco áreas clave de dichas reformas el próximo año: la reducción del exceso de capacidad, la disminución de existencias, el desapalancamiento, la rebaja de los costes de las empresas y la subsanación de los puntos débiles, señala el documento.
En ese marco, el experto en Relaciones Internacionales se refirió también a la decisión de Beijing de aumentar sus esfuerzos por dar entrada a la inversión extranjera en 2017, a partir de un entorno empresarial ajustado a la ley y un mayor papel para las empresas de capital extranjero como elementos importantes en el fomento del desarrollo de la economía real.
"La República Popular China sigue siendo, de los países en vías de desarrollo, el principal destino de la inversión extranjera directa", enfatizó.
"La circunstancia especial, novedosa, es que desde el año 2002 China es también un exportador de capitales. Por primera vez en la historia, en 2015, o este año, China es exportador neto de capitales", ponderó Girado.
Que agregó: "Para una economía que estaba fuertemente empobrecida hace 60 años y tenía una importantísima proporción de su población en alto grado de ruralidad, que para 2016 o 2017 se convierta en un exportador neto de capitales, indica que la velocidad con que ha desarrollado ese proceso es extraordinaria. No tiene antecedentes", valoró.
Para el consultor, "China, como necesita dinamizar su mercado interno, estimula la inversión extranjera directa, en sectores en los cuales quiere desarrollarse".
"En línea con el plan de innovación tecnológica, y para generar una sociedad acomodada hacia el 2020, una nación innovadora, la República Popular estimula el ingreso de inversión extranjera para que formen joint ventures con capitales chinos para poder recibir transferencia tecnológica", explicó.
Se trata, precisó, de "inversiones extranjeras no para exportar desde China, como hacía hace 30 años, sino para aprovechar el mercado interno chino en productos en los cuales hay ya un grado importante de sofisticación tecnológica".
La inversión extranjera directa (IED) en la parte continental de China creció un 3,9 por ciento interanual, hasta alcanzar 731.800 millones de yuanes (unos 113.790 millones de dólares) en los primeros once meses de este año, de acuerdo con las cifras oficiales publicadas recientemente por el Ministerio de Comercio chino.