El proyecto de construcción de un parque nacional en el área de Sanjiangyuan, con el fin de proteger las cabeceras de los ríos Yangtse, Amarillo y Lancang (Mekong), será puesto en marcha con la construcción de varias carreteras y la instalación de cámaras de vigilancia para asistir el trabajo de protección.
El buró administrativo del Parque Nacional Sanjiangyuan anunció hoy lunes que para este año el parque contará con un presupuesto de 1.000 millones de yuanes (145 millones de dólares), los cuales se destinarán a la construcción de infraestructuras.
Desde abril de 2016, el buró ha conducido una operación de prueba de la gestión del parque nacional, el cual consta de una vasta zona de humedales y praderas ubicada en la meseta Qinghai-Tíbet, en el noroeste del país.
Para el año 2020, será el primer parque nacional del país administrado directamente por el gobierno central, según el plan oficial.
Bajo la gestión gubernamental, el parque empleará a más de 10.000 guardianes para patrullar sus más de 120.000 kilómetros cuadrados, una superficie superior a la del estado estadounidense de Nueva York.
Zhai Jinquan, funcionario del área de planificación del buró, dijo que este año en el parque se construirán carreteras, instalaciones de control de acceso, centros para visitantes, estaciones de preservación e instalaciones de tratamiento de aguas residuales.
"El parque es inmenso y escasamente poblado. Básicamente no hay vías, y los pastores tienen que movilizarse a caballo", explicó.
Zhai dijo también que para fomentar la protección de la ecología y las labores de aplicación de las leyes, en el parque se construirán caminos y carreteras, y además se instalará una red de supervisión remota.
Sanjiangyuan significa en mandarín "el origen de los tres ríos", y es, de hecho, la fuente de los principales ríos de China. Sin embargo la ecología de la zona se ha deteriorado a causa de actividades humanas como el pastoreo excesivo.
La reserva natural de Sanjiangyuan fue establecida en la provincia noroccidental de Qinghai en el año 2000, y en la reunión del Grupo Dirigente Central para la Reforma celebrada a finales de 2015, se tomó la decisión de convertirla en un parque nacional bajo administración directa del gobierno central.