CARACAS, 27 jun (Xinhua) -- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, insistió hoy en la necesidad de avanzar en un "diálogo de respeto" con su homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, a quien pidió detener "la locura de la derecha violenta venezolana".
"Si usted (Trump) algún día quiere hablar de paz, de relaciones de respeto, Nicolás Maduro, presidente de la República Bolivariana de Venezuela, está listo para conversar con usted de paz, de respeto, de prosperidad del continente", dijo Maduro en un acto político en Caracas.
El jefe de Estado venezolano, quien ha denunciado supuestos planes de Washington para desestabilizar a su gobierno, dijo creer "en el poder de la fuerza de un pueblo, así como creo en el poder de la fuerza de nuestra gloriosa Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB)".
"Deben saber los que quieren destruir a Venezuela, que Venezuela no se va a rendir, y que somos la más grande garantía de paz, estabilidad económica, energética, financiera, social y política de América del Sur, del Caribe, de Centroamérica, de América Latina", dijo Maduro.
En su mensaje a Trump, Maduro agregó que "si llegaran a destruir a Venezuela estas fuerzas de odio, de fascismo, de violencia, el mar Mediterráneo sería un niño de pecho, a como se convertiría el mar Caribe con miles y millones de caribeños con rumbo a Estados Unidos".
"No queremos eso, no (los) podrían detener. Tendrían que construir, presidente Trump, 20 muros en el mar (...) Por eso yo digo, presidente Donald Trump, usted tiene la palabra, usted tiene la responsabilidad, detenga la locura de la derecha violenta venezolana", abundó.
Las diferencias en las relaciones diplomáticas entre Caracas y Washington se han intensificado durante los últimos meses, al considerar que la administración de Trump, que se instaló en enero pasado, ha mantenido una postura crítica sobre el gobierno de Venezuela.
Maduro acusa de "injerencista" a la administración estadounidense, que pide a Caracas la liberación de los supuestos presos políticos, abrir un canal humanitario y aprobar elecciones generales adelantadas para solucionar la crisis de la nación caribeña.