Pupilas insomnes cuidan la vida salvaje en la meseta Qinghai-Tibet (2)

Pueblo en Línea  2017:08:22.15:24

Los oficiales de la reserva natural de Hoh Xil detienen el tráfico mientras que el antílope tibetano cruza la carretera durante sus migraciones en la meseta Qinghai-Tíbet. [Foto: Wang Zhuangfei]

Los doce colegas encontraron difíciles las condiciones de vida y el duro entorno natural. Vivían en tiendas de campaña y en cuarteles militares abandonados.

"Muchos renunciaron durante esos años", recuerda Zhan.

Zhan también lo consideró. Un trabajo en la ciudad sería mucho más fácil.

Pero su persistencia propició una profunda relación con los animales salvajes.

"Lloraría si tuviera que cambiar de trabajo ahora", confiesa.

En ese momento, no tenía acceso a llamadas telefónicas. Su único contacto con su familia era epistolar.

Zhan le pedía a los camioneros que pasaban por la zona que pusieran las cartas en el correo. Escribía varias copias con la esperanza de que al menos uno de ellas le llegara a sus seres queridos.

Las responsabilidades de Zhan han sido esencialmente las mismas a lo largo de las décadas.

Él y sus colegas patrullan las vastas praderas. Inspeccionan vehículos en las carreteras y buscan pistas sospechosas de vehículos de cazadores furtivos o mineros ilegales.

"Los primeros años de patrullaje tuve solamente tres días de descanso en el mes."