Ma Xinyang cuida de su padre. [Foto: proporcionada]
Beijing, 08/11/2017 (El Pueblo en Línea) -Todos los días, Ma Xinyang se levanta a las 5 de la mañana.Después de preparar un sabroso desayuno y antes de ir a la escuela, ella alimenta a su padrea través de un dispositivo artificial.
Ma tiene sólo 13 años. Estudia en la secundaria Wudalianchi No. 2 en la provincia de Heilongjiang.
Después que su padre sufrió un grave accidente de tráficohace tres años, ella tuvo que comenzar a cuidarlo.
"Estuvo ingresado siete meses", recuerda la niña. "Afortunadamente lograron salvarle la vida, pero el médiconos informó a mi madre y a mí que permanecería en estado vegetativo, a menos que ocurriera un milagro."
"Y creemos que habrá un milagro", agrega con absoluta convicción.
El accidente de su padre transformó la vida de toda la familia.La consentidaniña de la casa tuvo que madurar de golpe.
"Tenía claro que ya no podía seguir siendo una flor de invernadero. A partir del accidente de mi padre, tuve que crecerme y ayudar a mi madre a compartir el peso de la familia", detalla la pequeña Ma.
Entonces, aprendió a cocinar, a limpiar y a lavar la ropa.También adquirió algunas habilidades de enfermería para asistir a su padre.
"Mi hija me proporciona un gran apoyo", asegura Wang Changrong, madre de Ma Xinyang. "Su padre está en buenas condiciones físicas, a pesar de que no ha podido recuperar la conciencia. Tiene buen color y,después de salir del hospital, su peso ha subido de 60 a 80kilogramos”.
Todo el trabajo familiar no ha interrumpido los estudios de la niña. Ella continúa obteniendo buenas calificaciones.
"Mi padre no estaría feliz si yo descuido mis estudios por su causa", confiesa Ma. "Por lo tanto, tengo que redoblar mis esfuerzos para conseguir buenos resultados. Ese es mi mejorregalo para él."
Cuando ella dispone de algún tiempo libre, comparte algunas anécdotas escolares con su padre o lee en voz alta a su lado.
"Me gusta releerle las historias que me leyó cuando era niña. Me recuerdan tiempos felices. Tengo fe en que pronto volverán”, subraya Ma.
Sin importar lo duroque ahora sea la vida para su familia, la pequeña gigantesiempre mantiene la esperanza en su alma y la sonrisa en su rostro.
A finales de octubre, a Ma se le otorgó el título "Piedad filial juvenil más bella", evento organizado por CCTV.
Es la única persona que ha ganado estegran honor enla provincia de Heilongjiang.
Ma Xinyang lava los pies de su padre. [Foto: proporcionada]