MONTEVIDEO, 28 nov (Xinhua) -- Latinoamérica debería definir estrategias subregionales y regionales en sus lazos con China, dijo el experto uruguayo Ignacio Bartesaghi ante la cumbre empresarial China-LAC (Latinoamérica y el Caribe) que se celebra esta semana en Uruguay.
El evento, que acoge cada año de forma alterna una ciudad china y una latinoamericana, tendrá lugar esta vez en el balneario Punta del Este del 30 de noviembre al 2 de diciembre y, según Bartesaghi, director del Observatorio Asia-Pacífico, servirá a ambas partes para "conocerse más", en especial para Latinoamérica, que no tiene una estrategia de vínculo con el gigante asiático.
Representantes gubernamentales, expertos y más de 2.000 empresarios interesados en un mayor intercambio participarán en la cumbre, en la que se podrán comprobar "los cambios en la economía china, qué impacto tienen en la región y qué beneficios podemos tener", dijo.
Uno de los ejes temáticos será la iniciativa china de la Franja y Una Ruta y, aunque la región no es su foco, sí puede verse favorecida a través de "planes de infraestructura que América Latina necesita y que China puede brindar", afirmó el también decano de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad Católica (UCU).
Por eso, América Latina debe definir "políticas nacionales y subregionales" de "qué podemos pedirle a China en este nuevo escenario". "Ahí la pelota está más de nuestro lado, porque China ya tiene una estrategia definida", enfatizó.
Resaltó que durante la cumbre se abordará también "si se pueden abrir beneficios en el comercio de servicios, si realmente va a cambiar el patrón chino de la inversión en América Latina".
Bartesaghi será uno de los conferenciantes el 1 de diciembre en la segunda sesión plenaria, titulada "Desarrollo y cooperación en infraestructura entre China y América Latina y Caribe".
Este tipo de cumbre, en su opinión, permite "toparnos con la realidad de los cambios que se están dando en China y cómo nos posicionamos para dejar de pensar en una lógica de China 'nos compra productos primarios y nos vende productos electrónicos'".
"La discusión central va a estar allí... en conocerse un poco más" tanto a nivel institucional como de las empresas, resumió.
En la región, dijo, Uruguay es "el único que ha tenido un intento de marcar un diferencial con China", al anunciar el interés mutuo de negociar un tratado de libre comercio (TLC) durante la visita del presidente Tabaré Vázquez a China en octubre de 2016.
Más allá de la voluntad de Montevideo, es difícil concretar ese acuerdo porque requiere el aval de sus otros socios en el Mercosur (Argentina, Brasil y Paraguay).
A su juicio, el Gobierno de Vázquez debería continuar con las negociaciones porque "el cerrar un TLC con China implica mucho más que eso" y es "profundizar en términos estratégicos".
"No cabe duda de que China tiene interés en Uruguay no por el tamaño de su economía sino como paso previo para avanzar en la región", evaluó.