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Presidente turco espera que operación en Siria termine pronto

ESTAMBUL, 21 ene (Xinhua) -- El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, expresó hoy la esperanza de que la actual operación militar contra las milicias kurdas en Afrin, Siria, termine "en muy poco tiempo".

Esta mañana, Turquía envió fuerzas terrestres a Afrin, noroeste de Siria, como parte de la llamada Operación Ramo de Olivo, luego de un día de ataques aéreos y de artillería contra las Unidades de Protección Popular (YPG), unas milicias kurdas.

"Ojalá que terminemos esta operación en muy poco tiempo", dijo Erdogan en un discurso en la ciudad occidental de Bursa.

El presidente también amenazó al Partido Democrático Popular, una filial urbana del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), y dijo que ha sido informado de grupos que han salido en las calles.

Ankara considera a las YPG una filial siria del PKK, grupo que ha combatido a Turquía durante más de 30 años. Estados Unidos ha ofrecido apoyo militar a las milicias kurdas e incluso propuso hace unos días establecer una fuerza de seguridad fronteriza en el norte de Siria dominada por combatientes kurdos, lo que irritó a Turquía y tensó las relaciones bilaterales.

Desde hace mucho tiempo, Turquía ha ideado una intervención militar en Afrin, uno de los tres cantones forjados por las YPG durante la guerra civil siria.

Erdogan anunció el inicio de la operación en Afrin el sábado y dijo que la intervención se extenderá a Manbij, norte de Siria.

Turquía busca establecer una zona de seguridad de 30 kilómetros con la operación en Afrin y la ofensiva de cuatro etapas se realizará "muy rápido", dijo hoy el primer ministro turco, Binali Yildirim.

El viceprimer ministro turco, Bekiz Bozdag, dijo que la operación continuará hasta que "todos los elementos terroristas hayan sido removidos", incluyendo el PKK, las YPG y el Estado Islámico.

"No puedo decir cuánto tardará la operación, hablar sobre la duración de la operación no es adecuado", indicó. "Nuestro objetivo es terminar la operación tan pronto como sea posible".

Bozdag indicó que Turquía devolverá la región a "sus auténticos dueños" una vez que termine la intervención y que no existe la posibilidad de un enfrentamiento con Estados Unidos en el terreno.

De agosto de 2016 a marzo de 2017, Turquía llevó a cabo la Operación Escudo Eufrates en el norte de Siria, en la que tomó el control de varias localidades en su esfuerzo para expulsar al Estado Islámico y evitar la unión de cantones kurdos en la frontera turca.