MEXICO, 20 may (Xinhua) -- Los cuatro candidatos a la presidencia de México reconocieron esta noche de domingo que el Gobierno mexicano ha sido débil frente al presidente estadounidense, Donald Trump, quien ofende de manera sistemática al país latinoamericano y a sus ciudadanos.
El izquierdista Andrés Manuel López Obrador; el conservador Ricardo Anaya; el exgobernador del norteño estado de Nuevo León Jaime Rodríguez Calderón, conocido como "El Bronco" y quien juega la presidencia por la vía independiente; así como el excanciller y exministro de Hacienda, José Antonio Meade, que no pertenece a ningún partido pero es respaldado por el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), se volvieron a ver las caras, en el marco del segundo debate público de aspirantes a la Presidencia de México, realizado en la ciudad fronteriza de Tijuana.
"Se debe poner en su lugar a Trump", expuso Rodríguez, quien abrió el debate, realizado en la Universidad Autónoma de Baja California (UABC).
Para Rodríguez, la mejor política exterior ante las políticas de Trump y la dependencia comercial del país latinoamericano hacia el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), es terminar con la influencia de Estados Unidos sobre México.
A su vez, Anaya lamentó la recepción de Trump, en la residencia oficial de Los Pinos cuando este era todavía candidato.
"No fue un error, fue una humillación", enfatizó el candidato por la coalición "Por México al Frente", constituido por el opositor Partido Acción Nacional (PAN) y el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Asimismo, sostuvo la necesidad de "diversificar y replantear" la relación de México con Estados Unidos, por lo que de llegar a la presidencia, dijo, defenderá el interés nacional, con "dignidad, firmeza y respeto mutuo".
En tanto que Meade, candidato oficial por la alianza "Todos por México", integrada por el PRI, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y Nueva Alianza, destacó que no debe haber "ningún acuerdo con Estados Unidos si no hay respeto", al agregar que Trump ha ofendido "continuamente a los mexicanos".
En tanto que López Obrador, puntero de las más recientes encuestas, según los medios mexicanos, consideró que México logrará el respeto de Estados Unidos con "autoridad moral".
"Los gobernantes de México no han tenido autoridad moral, y por lo mismo, no han tenido autoridad política", expuso el candidato por la coalición Juntos Haremos Historia, integrada por las formaciones políticas Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Partido del Trabajo (PT) y Partido Encuentro Social (PES).
López Obrador, y tres veces aspirante a la presidencia de México, aclaró que su intención para la relación con Estados Unidos, es y será de "amistad y no de subordinación".
Cada uno de los cuatro candidatos a la Presidencia de México, centraron su debate en Trump, quien ha tensado la relación bilateral de México con Estados Unidos en lo que va de su administración frente a la Casa Blanca, no solo en el aspecto comercial, al amenazar con cancelar el TLCAN en más de una ocasión por considerarlo como un acuerdo que no beneficia de la misma manera a los estadounidenses, sino también el aspecto migratorio, al calificar a los indocumentados como delincuentes, narcotraficantes, y más recientemente compararlos con animales.
En ese sentido, cada uno de los candidatos garantizó que si bien es importante seguir manteniendo una relación constructiva con el país vecino del norte, también se comprometieron en seguir diversificando el comercio e inversión con otros países, así como el garantizar y salvaguardar los derechos de los connacionales en Estados Unidos.
Asimismo, aunque en más de dos ocasiones hubo diferencias y discrepancias entre los candidatos, reconocieron al final que se debe intensificar el trabajo en materia de seguridad fronteriza y combate al crimen transnacional y tráfico de armamento de Estados Unidos a México, al tiempo de sostener la necesidad de salvaguardar a los migrantes, particularmente de los países centroamericanos a su paso por México.
López Obrador, quien reiteró que buscará tener salarios justos y trabajar para que el salario se vaya homologando con el de Estados Unidos y Canadá, también propuso que buscará con estos dos países vecinos del norte "una alianza" a favor del progreso que incluya además a Centroamérica "para el desarrollo, para que haya bienestar y con ello, conseguir la paz".
Este segundo debate se realiza a 40 días previos de celebrarse unos comicios federales, considerados los más importantes por el número de votantes que se esperan y gastos, así como con la ausencia de la exprimera dama Margarita Zavala, que el pasado 22 de abril renunció a la contienda electoral por la presidencia de México, luego de manifestar que en el país una candidatura independiente tiene pocas posibilidades de ganar.
El próximo 1 de julio, se espera que acudan unos 89 millones de mexicanos a votar, para elegir al nuevo presidente del país, a ocho gobernadores y al jefe del Gobierno de Ciudad de México, y además, se renovarán los 500 diputados federales y los 128 senadores, y se elegirán 972 diputados locales y 1.597 alcaldes.