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"Trampa de ingresos medios" desde la experiencia de tres generaciones en Argentina

Actualizado a las 07/06/2018 - 09:45
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Por Victoria Argüello

BUENOS AIRES, 6 jun (Xinhua) -- En una casa de la ciudad de San Justo, a 30 kilómetros de la capital de Buenos Aires, Argentina, vive Matías Ramírez, un profesor de Artes Plásticas, quien narró a Xinhua indirectamente como la "trampa de ingresos medios" ha repercutido en tres generaciones de su familia.

Ramírez ha trabajado desde los 16 años en diversas áreas de la economía argentina, la más importante en el área del consumo, con trabajos que van desde "repositor" (persona que coloca productos en anaqueles para su exhibición) en supermercados y restaurantes de la Capital Federal, hasta en atención al cliente.

La "trampa de ingresos medios" es definida por algunos economistas como un estancamiento que afecta a algunos países emergentes, los cuales no logran superar esta fase.

El joven de 25 años y el segundo mayor de cinco hermanos dijo que tuvo que trabajar para pagar los gastos de su carrera en docencia de las artes, así como para ayudar a su familia a obtener mayores ingresos.

"Como el salario a veces no alcanzaba, yo trataba de rebuscarme en el sector de compra y venta por internet, específicamente en Mercado Libre; también trabajé de ayudante de escenografía o en restaurantes con servicios a domicilio", explicó.

En la economía argentina el consumo tiene un peso importante que según consultores y analistas privados alcanza al menos dos tercios del Producto Interno Bruto (PIB) del país.

Un informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) mostró que el consumo privado en Argentina creció 3,6 por ciento en 2017, en comparación con 2016.

Distinta a la historia de su madre y su abuela, Matías Ramírez, pudo cursar estudios superiores en un instituto gratuito.

Sin mayor ayuda estatal, salvo la seguridad social, actualmente trabaja para pagar gastos personales y se mantiene soltero y sin hijos.

Su madre, Sandra Palacios, tiene 45 años y se desempeña como empleada doméstica desde su juventud cuando se trasladó desde la provincia de Jujuy (norte) hasta la capital de Buenos Aires en búsqueda de mejores condiciones laborales.

Palacios contó a Xinhua que las condiciones de hace casi 30 años eran más difíciles, pues las personas contaban con menos posibilidades de acceso a la educación.

"No tenía muchos medios para sustentar esos estudios y en mi familia apenas alcanzaba para los estudios primarios, ya después cada quien debía elegir entre iniciar una carrera universitaria o trabajar para mantener a los hijos", dijo.

Sin seguridad social, Palacios debió trabajar en más de un sitio junto a su ex pareja para comprar la casa donde reside en el municipio La Matanza.

"El papá de mis hijos trabajaba como carnicero todo el día y yo le ayudaba con oficios de limpieza en hogares, ambos juntábamos la plata en dólares y cuando el dólar salto a tres veces su valor, aprovechamos esa plata y compramos la casa", comentó.

"A veces el trabajo y la manutención del hogar era difícil, mis hijos cursaron la primaria en jornada completa para yo poder trabajar todo el día", comentó.

Una historia similar vivió Bertha Palacios, abuela de Matías Ramírez, en una época donde la educación era opcional e imperaba el trabajo como principal vía para satisfacer las necesidades materiales.

La casa de Bertha, donde se crió Sandra Palacios, fue construida por sus mismos habitantes tras la compra de un "terreno fiscal" (del Estado).

Actualmente, la abuela de la familia Ramírez Palacios es jubilada y recibe una pensión por el fallecimiento de su esposo.

Las tres generaciones cuentan que el trabajo en relación de dependencia ha sido el principal motor de la economía familiar.

Según el Banco Mundial (BM), el PIB per cápita en Argentina era de 1.148,6 dólares en 1962 y de 12.440,3 dólares en 2016.

El máximo registro se alcanzó en 2015, cuando el PIB per cápita se estableció en 13.467,10 dólares, de acuerdo con los datos del BM.

De acuerdo con expertos locales, la parcial dependencia que tiene Argentina hacia el área del consumo ha entorpecido que se prioricen otros sectores clave para el desarrollo y el crecimiento, motivando que el país no logre superar la "trampa de ingresos medios".

Dentro de estas áreas fundamentales a desarrollar están las inversiones en infraestructura e innovación, la optimización de la industria y reformas en el sistema de justicia, seguridad social y educación.  

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