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Londres, 19/11/2018 (El Pueblo en Línea) - Un nuevo estudio publicado en la revista Nature reveló algunas complejidades, misteriosas e inesperadas, acerca del ciclo del agua en nuestro planeta. El manto terrestre consiste en un rompecabezas de placas tectónicas entrelazadas que se chocan y se deslizan una debajo de la otra. Durante estos movimientos, el agua se introduce en las llamadas zonas de subducción. A través de una combinación de calor y presión, esta agua se transforma químicamente en un mineral hidratado que queda atrapado dentro de las placas y es absorbido por la corteza terrestre, destaca RT.
Una investigación llevada a cabo por científicos de la Universidad Washington en San Luis —Misuri, EEUU— analizó la cantidad de agua absorbida de esta manera. Para ello, investigaron los datos relativos a la fosa de las Marianas, la formación natural más profunda de nuestro planeta, ubicada a casi 11 kilómetros por debajo del nivel del mar.
Con la ayuda de sismógrafos ubicados a lo largo de la fosa, los investigadores pudieron escuchar la actividad sísmica submarina y, esencialmente, mapear secciones del interior de la Tierra. Después de un año entero de observación de las placas de Mariana y del Pacífico, se descubrió que el manto terrestre contiene cuatro veces la cantidad de agua que se pensaba anteriormente, es decir, tanta agua como todos los océanos de la Tierra combinados.
Los científicos creen que la mayor parte del agua consumida en las zonas de subducción se expulsa nuevamente a la superficie en forma de vapor de agua durante las erupciones volcánicas. Sin embargo, estimaciones recientes revelan un gran desequilibrio en la absorción y en la salida de agua.
Durante los últimos 550 millones de años, los océanos han mantenido su nivel con pequeñas alteraciones. El agua que es absorbida en las zonas de subducción vuelve a subir de alguna manera y no se acumula de manera permanente dentro de las placas de la Tierra.
Los científicos, todavía, no saben cómo el agua retorna a la superficie.