BEIJING, 28 abr (Xinhua) -- Durante el II Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional, que se clausuró el sábado en Beijing, el gobierno chino enfatizó que está dispuesto a importar más productos agrícolas competitivos de alta calidad y promover un desarrollo comercial equilibrado.
Se espera que el fructífero comercio sino-latinoamericano de productos agrícolas y sus derivados, aproveche esta oportunidad para cosechar más jugosos frutos.
La Iniciativa de la Franja y la Ruta se ha arraigado y florecido en América Latina en los últimos años, y la escala del comercio chino-latinoamericano ha seguido aumentando, sobre todo en los que se refiere a los productos agrícolas. Los ricos productos latinoamericanos que hoy son comunes sobre las mesas de los consumidores chinos son los mejores ejemplos.
A principios de este año, ocho contenedores llenos de cerezas frescas de la Patagonia argentina llegaron a los puertos chinos y se vendieron todos durante la Fiesta de la Primavera.
La llegada y entrega sin problemas del primer envío de cerezas a China marcó el inicio de la apertura del mercado chino a las cerezas de Argentina. El secretario de gobierno de Agroindustria de Argentina, Luis Miguel Etchevehere, cree que el sector de la cereza argentina logrará un rápido desarrollo y permitirá la creación de 100.000 puestos de trabajo en los próximos 10 años.
Durante el I Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional, China y Argentina firmaron un plan estratégico para la cooperación agrícola y un acuerdo de cooperación sobre inspección y cuarentena. Este año se espera que las uvas, los arándanos, la carne de vacuno deshuesada, el cordero o la miel argentinos, entre otros productos, ingresen al mercado chino.
Chile, país vecino de Argentina, es el mayor proveedor de fruta fresca de China y su mayor proveedor de cerezas importadas. Las exportaciones chilenas de cerezas a China en la temporada de 2017-2018 superaron las 125.000 toneladas, cifra que supuso un récord.
La versión actualizada del Tratado de Libre Comercio entre China y Chile entró en vigor oficialmente el pasado marzo, y la tasa de cobertura de productos sin aranceles de las dos partes alcanzará el 98%. El comercio de productos agrícolas entre China y Chile experimentará una nueva ronda de crecimiento vigoroso.
Desde el 1 de abril, China ha reajustado la tasa impositiva original aplicable para las ventas sujetas a impuestos o las mercancías importadas en el IVA general del contribuyente. Tomando como ejemplo las cerezas importadas, la tasa impositiva se ajustó del 10% al 9%. La importación de cerezas por valor de un millón de dólares puede reducir la carga fiscal en casi 70.000 yuanes (unos 10.000 dólares), lo que es una gran ventaja para los importadores y consumidores.
Además de Argentina y Chile, cada vez más países latinoamericanos han obtenido la calificación para exportar productos agrícolas a China. En marzo de este año, el primer lote de alforfón boliviano llegó al puerto de Tianjin y pasó el despacho de aduanas. La Administración General de Aduanas publicó los requisitos de cuarentena para la importación de plantas de piña fresca de Panamá. Las piñas que cumplan con esos requisitos podrán ingresar al mercado chino.
En el informe anual Perspectivas del Comercio Internacional de América Latina y el Caribe 2018, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas señaló que el volumen total de exportaciones de los países de América Latina creció un 9,7% interanual el año pasado, que fue el segundo ejercicio consecutivo de crecimiento sustancial. El documento indica que la principal razón para el crecimiento continuo de las exportaciones de productos regionales es la fuerte demanda en el mercado chino.
América Latina constituye la extensión natural y es una parte indispensable de la Ruta de la Seda Marítima del siglo XXI y de la construcción de la Franja y la Ruta. China y Perú sellaron un memorándum de entendimiento para impulsar conjuntamente la construcción de la Franja y la Ruta y el socio peruano se convirtió en el 19º país de América Latina y el Caribe en firmar acuerdos relevantes con China.
La Iniciativa de la Franja y la Ruta puede ser un "elemento de aporte muy importante para precisamente poder hacer esa mejora en la conectividad que nos brinde a su vez una reducción de los costos logísticos y, por ende, una mayor competitividad de nuestros países", señaló el ministro de Comercio Exterior y Turismo peruano, Edgar Vásquez, en una entrevista exclusiva con Xinhua.
En el marco del foro se celebró la primera conferencia de empresarios de la Franja y la Ruta para construir una plataforma para la comunicación y la cooperación, el acoplamiento de la cooperación, la firma de proyectos y el fortalecimiento de la cooperación entre los círculos industriales y comerciales de diversos países.
Empresarios de América Latina también han aprovechado la oportunidad para apuntar al mercado chino. Alejandro Pérez, vicepresidente de la Cooperativa Nacional de Productos de Leche (Conaprole) de Uruguay, es uno de ellos.
De acuerdo con la Memoria Anual 2018 de Conaprole, las exportaciones a China casi triplicaron su participación en la cartera y la cooperativa está trabajando con firmeza para ampliar las colocaciones en el mercado chino.
La idea es seguir creciendo en China para convertirla en su tercer mayor destino de exportaciones en un corto periodo, objetivo al que también contribuye la Iniciativa de la Franja y la Ruta, afirmó Pérez.
China ya es hoy el segundo mayor socio comercial de América Latina. En 2018, el valor total de las importaciones y exportaciones entre China y América Latina alcanzó los 307.400 millones de dólares, una subida del 18,9% respecto al mismo período del año pasado.
Las cerezas frescas de Chile llegan a las mesas de los consumidores chinos después de un recorrido de 20.000 kilómetros y en tan solo 20 horas, lo que es una representación vívida de la construcción conjunta de la Franja y la Ruta entre China y América Latina.