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Reputado académico estadounidense insta a EEUU a dejar de hacer de China su "chivo expiatorio"

NUEVA YORK, 27 may (Xinhua) -- El notable desarrollo de China en las últimas décadas se ha logrado de manera justa y razonable, y Estados Unidos debería dejar de hacer de China el "chivo expiatorio" de sus propios problemas de desigualdad, dijo el reputado académico Jeffrey David Sachs, asesor especial del secretario general de la ONU sobre los Objetivos de Desarrollo Sustentable.

"China ha seguido las reglas occidentales en los últimos 40 años, poniéndose gradualmente al día al igual que hicieron los aliados asiáticos de Estados Unidos en el pasado", escribió Sachs, director del Centro para Desarrollo Sustentable en la Universidad de Columbia, con sede en Nueva York, en un artículo publicado en la web de la CNN.

Sin embargo, EEUU está tratando ahora de detener el desarrollo de China "cambiando las reglas del comercio internacional de manera abrupta y unilateral", lo que podría "resultar desastroso tanto para Estados Unidos como para el mundo entero", señaló el profesor de economía.

Titulado "China no es la fuente de nuestros problemas económicos, la avaricia corporativa lo es", el artículo hace un repaso por la historia contemporánea de China remontándose al siglo XIX, que, según Sachs, estuvo dominado por "reveses geopolíticos y fracasos económicos relacionados".

Lo que China ha hecho es tratar simplemente de compensar el "tiempo perdido", escribió Sachs, y agregó que "no está haciendo nada particularmente inusual para un país que se está recuperando".

Más importante aún, añadió el experto en desarrollo sostenible, al culpar a China de la pérdida de empleos nacionales, EEUU simplemente ignora los enormes beneficios que ha generado el comercio bilateral.

"Acusar a China de injusticia en esto es incorrecto: muchas empresas estadounidenses han cosechado los beneficios de fabricar en China o exportar productos allí", señaló Sachs, que agregó que los consumidores estadounidenses disfrutan de mejores niveles de vida como resultado de los productos chinos de bajo costo y cada vez mejor calidad.

"Una guerra comercial con China no resolverá nuestros problemas económicos", continuó. Estados Unidos debería, por el contrario, permitir que su propia gente "comparta los beneficios del crecimiento económico" de una manera que "los ganadores que se benefician compensan a los perdedores".

No es la primera vez que Sachs expresa una opinión similar. En un seminario celebrado por la Cámara General China de Comercio-EEUU y el Standard Chartered Bank este mes en Nueva York, Sachs, orador invitado, encomió a China por lograr en los últimos años "el desarrollo económico más rápido en la historia del mundo", basado en "una buena economía" y del que todo el mundo debería alegrarse.

Acusar a China de haber "engañado a su manera" para un rápido crecimiento es "simplemente falso" y hace gala de una comprensión completamente inculta del desarrollo chino, señaló el experto en el seminario. "China se está poniendo al día de manera efectiva, y lo está haciendo de una manera inteligente, y lo está haciendo de una manera normal y lo está haciendo de una manera pacífica basada en reglas".

La retórica de etiquetar a China como "enemigo" de EEUU se ha acalorado recientemente, en parte a través de algunas columnas en varias publicaciones nacionales de algunos escritores que "probablemente nunca hayan estado en China", continuó en su discurso.

Este punto de vista, dijo, es peligroso y debería evitarse para que la gente no se engañe. Las relaciones bilaterales entre EEUU y China no pueden permitirse errores de cálculo graves, ya que las dos mayores economías tienen una "influencia decisiva" en el futuro del mundo, agregó.

"Este es un momento muy importante para las relaciones entre China y Estados Unidos, y es mejor que lo entendamos", dijo Sachs.