(Foto: Xinhua)
Por Diario del Pueblo
Beijing, 02/07/2019 (El Pueblo en Línea) - Los resultados de la reunión entre el presidente chino Xi Jinping y su homólogo estadounidense, Donald Trump, al margen de la cumbre del G20 en Osaka el 29 de junio, enviaron una señal positiva a los dos países y al mundo.
En su reunión, los dos líderes acordaron reiniciar las consultas económicas y comerciales entre sus países sobre la base de la igualdad y el respeto mutuo.
También acordaron que la parte estadounidense no impondrá nuevos aranceles a las exportaciones chinas y los equipos de negociación de ambas partes mantendrán conversaciones sobre temas relevantes.
Solo al captar correctamente los temas fundamentales relacionados con las relaciones entre China y EE.UU, los dos países pueden emprender el curso del desarrollo de sus relaciones. Es de gran importancia promover conjuntamente una relación China-EE.UU con coordinación, cooperación y estabilidad.
La esencia de la cooperación económica y comercial China-EE.UU es encontrar beneficios mutuos y crear situaciones en las que todos ganan, enfatizó Xi.
China y Estados Unidos tienen intereses altamente integrados y extensas áreas de cooperación. Deben convertirse en buenos socios cooperativos, lo que es bueno para ambas partes, así como para el mundo. Xi ha enfatizado repetidamente este punto y la postura de China nunca ha cambiado.
Los chinos y los estadounidenses tienen una larga tradición de amistad. En el 40 aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre China y Estados Unidos, la gente no debe olvidar la profunda amistad entre los dos pueblos a partir de la "diplomacia de ping-pong", y las oportunidades de desarrollo económico ofrecidas a China y a Estados Unidos por la apertura del mercado chino.
Responder a la voz de la gente y salvaguardar los intereses comunes de China y EE.UU requiere que las dos partes trabajen arduamente para explorar y movilizar toda la energía positiva y potencial. De esa manera, las perspectivas de cooperación entre los dos países se ampliarán y el impulso para la acción constructiva se fortalecerá.
Si bien existen algunas diferencias entre China y Estados Unidos, la realidad de importancia dominante es que los intereses de ambas partes están muy interrelacionados y los campos de cooperación son amplios.
Para abordar la relación entre los principales países, debemos centrarnos en el panorama general, apoyarnos en la altura general y sopesar racionalmente las ventajas y desventajas.
Controlar las diferencias es una responsabilidad que China y Estados Unidos deben asumir conjuntamente. Es imperativo evitar cometer errores históricos irreparables debido a la falta de visión y, en particular, es necesario ser consciente de no caer en las llamadas trampas del conflicto y la confrontación.
Lo correcto es dejar que la verdadera sabiduría juegue un papel, elegir el camino de la promoción mutua y el desarrollo común y crear condiciones para perspectivas más brillantes.
Por su parte, Trump dijo que valora la buena relación con Xi, y añadió que su país está dispuesto a cooperar con China.
La parte estadounidense no alberga hostilidad hacia China, espera mejores relaciones entre los dos países y seguirá los principios y el consenso establecidos por los dos jefes de Estado.
Los comentarios de Trump también atrajeron la atención internacional. Al tomar la decisión de reiniciar las consultas económicas y comerciales, los dos países han indicado que están dispuestos a encontrar una solución mutuamente aceptable para resolver problemas a través del diálogo y la consulta. La clave es mantener las palabras y tomar acciones.
Vale la pena señalar que solo cumpliendo con la voluntad de los dos pueblos y respetando las reglas, China y Estados Unidos pueden maximizar los intereses comunes. Ambas partes se benefician de la cooperación y pierden en la confrontación, y la cooperación y el diálogo son mejores que la fricción y la confrontación.
La práctica ha demostrado repetidamente que la clave para una relación sana entre China y EE.UU es comprender firmemente la dirección correcta. Sin el respeto mutuo, la igualdad y el beneficio mutuo, es imposible que las relaciones entre China y Estados Unidos sigan desarrollándose de manera saludable y estable.
En la actualidad, es urgente que los dos países sigan los principios y la dirección establecidos por los dos jefes de Estado manteniendo intercambios a todos los niveles y fortaleciendo la cooperación en varios campos.
En la Cumbre de Osaka, China anunció medidas para ampliar la apertura, que incluyen una mayor apertura de su mercado, la expansión proactiva de las importaciones, la mejora continua de su entorno empresarial para las empresas extranjeras, la igualdad de trato para todas las inversiones extranjeras y la continuación de diversas negociaciones de acuerdos comerciales.
China está acelerando la formación de un nuevo paisaje de apertura y abrazando un brillante futuro de desarrollo de alta calidad.
El país tiene plena confianza en seguir su camino y manejar bien sus propios asuntos. Trabajará en el espíritu de la coexistencia pacífica y la cooperación de ganar-ganar con todos los demás países para construir una comunidad con un futuro compartido para la humanidad y buscar incansablemente un futuro más brillante para la economía global.
Para explorar el futuro de las relaciones entre China y Estados Unidos, no debemos saltarnos del contexto histórico e internacional.
Se espera que, al reiniciar las consultas económicas y comerciales, las relaciones económicas y comerciales entre China y EE.UU vuelvan al camino correcto.
Los dos países deben aumentar la confianza mutua con sinceridad, tomar decisiones con racionalidad y promover la acción a través del consenso. El proceso puede ser un esfuerzo largo y arduo. Debemos seguir adelante con un sentido de urgencia y perseverancia para lograr nuestros objetivos.