La candidata presidencial del Partido Socialista Brasileño (PSB), Marina Silva, acusó hoy al grupo político en el gobierno del Partido de los Trabajadores (PT) de ser el responsable de la existencia de corrupción en la estatal Petrobras.
"Quien mantuvo toda esa 'banda' que está acabando con Petrobras fue el actual gobierno, que dejó que todo eso ocurriera en una de las empresas más importantes del país", afirmó la aspirante a la prensa en una actividad de campaña en la capital del país.
La socialista se refirió de esta manera a las acusaciones hechas por el ex director de Abastecimiento de Petróleo Brasileño Sociedad Anónima (Petrobras), Paulo Roberto Costa, quien se encuentra en prisión por presunto "lavado de dinero".
Costa ha acusado de corrupción a más de 60 políticos del partido gobernante.
La candidata socialista, no obstante, evitó relacionar directamente en este caso a la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff.
"La presidenta tiene responsabilidades políticas. Yo no querría ser liviana y decir que ella tiene responsabilidad directa personalmente. Prefiero que las investigaciones ocurran", señaló.
Dijo que está preocupada con la verdad, por lo que desea "que las investigaciones se hagan con todo rigor, duela a quien duela, sea lo que sea que tengamos en esas investigaciones".
Las acusaciones del ex directivo de Petrobras se han convirtido en un tema de compaña de los principales candidatos a la presidencia, a menos de un mes de la primera vuelta de las elecciones generales que se llevarán a cabo el 5 de octubre.
Estas revelaciones amplificaron el clima de tensión electoral, ya que el ex directivo citó entre los acusados al ex candidato del PSB, Eduardo Campos, muerto en un accidente aéreo un mes atrás.
La muerte del líder socialista dio lugar en el PSB a la candidatura de Silva, quien ha registrado un rápido ascenso en los sondeos de intención de voto.
La revista brasileña Veja publicó el fin de semana pasado los nombres de varios políticos mencionados en la declaración de Costa ante el Ministerio Público.
Entre los citados están altos dirigentes del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), como Sergio Cabral, ex gobernador de Río de Janeiro; Roseana Sarney, gobernadora de Maranhao; y Henrique Alves, presidente de la Cámara de Diputados.
Se encuentran, además, Renan Calheiros, presidente del Senado, y Edison Lobao, ministro de Minas y Energía.
Fue mencionado también el tesorero nacional del gobernante Partido de los Trabajadores (PT), Joao Vaccarim, y del Partido Progresista (PP), Mario Negromonte, entre otros.