El presidente de Uruguay, José Mujica, aseguró hoy que los seis ex reclusos de Guantánamo que recibió el país como refugiados "llegan de una situación muy traumática".
Al arribar esta mañana a Montevideo de una gira que lo llevó por Venezuela, Ecuador y México, el mandatario aclaró que por ahora no piensa reunirse con los ex presos.
Agregó que prevé pedir más información sobre ellos y enfatizó que la ley que protege al refugiado "obliga a tener muchísima discreción".
Los ex presos de Guantánamo -cuatro sirios, un palestino y un tunecino- llegaron el domingo desde la base estadounidense donde estuvieron recluidos entre 12 y 13 años sin ser enjuiciados.
Mujica señaló que no puede "transmitir a la opinión pública lo que deben de sentir porque en alguna medida algunos de nosotros vivimos situaciones parecidas".
El ex gobernante sufrió la reclusión y tortura por su accionar como líder guerrillero en 1972, el año previo al Golpe de Estado, y entre 1973 y 1985, durante toda la última dictadura militar.
Por otra parte, aseguró que el traslado debió concretarse "hace meses" pero se postergó por dificultades de la política interna de los Estados Unidos y particularmente a la oposición de legisladores del Partido Republicano.
Desde su llegada, los ex reclusos fueron derivados al Hospital Militar de Montevideo donde se les efectuaban revisiones médicas.
Según información oficial, cinco de los refugiados podrían recibir el alta esta misma jornada mientras el restante, el sirio Abu Wael Dhiab, seguirá hospitalizado debido a que ha cumplido una huelga de hambre buena parte de los últimos dos años.
Las agencias de inteligencia de Estados Unidos señalaron que los presos trasladados son de "baja peligrosidad" y "liberables" desde 2009.
Además de Dhiab, el grupo de refugiados incluye a los sirios Abd Al Hadi Faraj, Ahmed Adnan Ahjm y Ali Hussein Shaaban; el palestino, Mohammed Tahamatan, y el tunecino Abdul Mohammed Abis.