El secuestro de un avión de EgyptAir ocurrido hoy repercutirá en los esfuerzos de Egipto para reactivar su débil industria turística a pesar de que parece que el incidente no estuvo relacionado con el terrorismo y de que todos los pasajeros resultaron ilesos.
El egipcio Seif-Eddin Mostafa, de 59 años, secuestró un avión Airbus 320 de EgyptAir cuando despegó del Aeropuerto de Borg al-Arab en Alejandría, con rumbo a El Cairo, luego de amenazar a la tripulación con un cinturón de explosivos falso. Mostafa obligó a aterrizar el avión en el Aeropuerto de Larnaca, en Chipre.
"De hecho, no se trató de un acto terrorista en absoluto. No obstante, dejará una mala impresión de la seguridad de navegación aérea de Egipto, aunque no se haya tratado de una falta de seguridad por parte de las autoridades egipcias", dijo a Xinhua Bashir Abdel-Fattah, experto político e investigador del Centro Al-Ahram para Estudios Estratégicos y Políticos en El Cairo.
Abdel-Fattah explicó que lo más probable es que el incidente haya sido causado por el estado psicológico del hombre, quien deseaba ir a Chipre para ver a su ex exposa y a sus hijas, pero no consiguió una visa.
En los últimos años, Egipto ha sufrido un estancamiento en la industria turística, una importante fuente de sus ingresos nacionales, debido a los disturbios políticos y al reciente accidente de un avión ruso en el Sinaí que dejó más de 200 muertos el año pasado, además de la muerte en circunstancias ambiguas de un estudiante italiano en El Cairo el mes pasado.
Este incidente, sin tener ese objetivo, "perjudicará los intentos de Egipto para reactivar el turismo y la inversión extranjera hasta que la comunidad internacional se dé cuenta de que no estuvo en absoluto relacionado con el terrorismo", explicó Abdel-Fattah, quien citó el ejemplo de la respuesta inicial de Rusia de no reanudar los vuelos suspendidos hacia Egipto.
La televisión egipcia mostró un video en el que el secuestrador es revisado a fondo en el Aeropuerto de Alejandría tras atravesar por una maquina de escaneo junto con los demás pasajeros del vuelo y que ningún explosivo o artículo prohibido fue encontrado en su posesión.
"La seguridad del aeropuerto de Egipto no es la responsable en este caso y es muy difícil, si no es que imposible, burlar la seguridad del aeropuerto egipcio", dijo Abdel-Latif al-Bedaini, experto en seguridad y ex asistente del ministro del Interior.
Al-Bedaini señaló que todavía está en transcurso la investigación del accidente del avión ruso y dijo que el artículo explosivo causante del incidente pudo haberse colocado fuera de Egipto.
Al-Bedaini, quien trabajó en la seguridad del aeropuerto de El Cairo durante 20 años, dijo a Xinhua que hay cuatro áreas en las que se revisa a los pasajeros en los aeropuertos egipcios, con métodos de revisión tanto manuales como electrónicos, y afirmó que la seguridad aeroportuaria en el país es una de las mejores del mundo.
"El cinturón falso es un claro testimonio de que la seguridad del aeropuerto no fue burlada", añadió el experto en seguridad, quien elogió la respuesta "profesional" de la tripulación de EgyptAir hacia el secuestrador y sus esfuerzos para garantizar la seguridad de los pasajeros, de los cuales 21 no eran egipcios.
El Ministerio del Interior de Egipto indicó hoy en una declaración que el hombre tiene una ex esposa chipriota y que había sido condenado a un año en prisión, pero escapó durante los disturbios políticos de 2011, para regresar a la cárcel en enero de 2014 y ser liberado en enero de 2015.
Desde el levantamiento de 2011 que depuso al ex presidente Hosni Mubarak, Egipto ha atravesado una recesión económica por la industria turística en desaceleración y por la falta de inversión extranjera, lo que ha causado el desplome de las reservas de divisas del banco central egipcio desde los 36.000 millones de ese entonces hasta los 16.500 millones de dólares actuales
"El secuestro de hoy podría afectar las inversiones turísticas, sin embargo, en cuanto a otras inversiones como exportaciones e importaciones, no creo que resulten perjudicadas", dijo Sameh Mostafa Zaki, miembro de la junta de la Cámara de Comercio de El Cairo y vicepresidente del Departamento de Exportaciones de la cámara.
El economista considera que estos asuntos no dañarán el turismo ni las inversiones del país en general, dado que el secuestro no estuvo relacionado con actos terroristas y que el secuestrador fue diagnosticado con inestabilidad psicológica.
Hoy por la noche, todos los pasajeros y miembros de la tripulación del Airbus A320 de EgyptAir llegaron al Aeropuerto de El Cairo para reunirse con sus familiares que aguardaban en el aeropuerto a su llegada.