Las fuerzas policiales antiterroristas de Turquía cerraron durante un breve periodo de este domingo la base aérea de Incirlik, situada en el sureste del país, para evitar un nuevo intento de golpe de Estado, dijo el Hurriyet Daily News.
La operación del cierre llevada a cabo por las fuerzas policiales se completó en dos horas y media. Anteriormente, se había informado de que partidarios del clérigo musulmán Fethullah Gulen podrían realizar un nuevo intento de golpe en esta base aérea, según Hurriyet.
La base aérea de Incirlik es utilizada por EEUU y da amparo a los aviones de combate de la coalición liderada por este país, que lanza ataques aéreos en Siria e Irak en contra del grupo Estado Islámico, prohibido en muchos países.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, anunció el sábado que la agencia de inteligencia del país estará bajo su control y los comandantes militares darán cuenta al ministro de Defensa.
En una entrevista con los canales ATV y A Haber, Erdogan dijo que las medidas tienen por objetivo poner al Ejército turco bajo el control civil después del fallido intento de golpe de Estado del mes pasado.
Un total de 1.389 soldados golpistas, incluyendo el consejero militar de Erdogan, fueron expulsados de las Fuerzas Armadas turcas, anunció el boletín oficial del Estado el domingo.
En total, 8.651 soldados participaron en el fallido intento golpista del 15 de julio, lo que representa un 1,5 por ciento del personal total del Ejército, dijo el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas Turcas.