Un fiscal local dijo hoy que la policía "actuó con legalidad" al disparar y matar a una persona se raza negra en un incidente ocurrido en septiembre en Charlotte, Carolina del Norte.
"Toda la evidencia creíble y disponible indica que él estaba armado", dijo el fiscal de distrito del condado de Mecklenburg, R. Andrew Murray, sobre Keith Scott, la víctima.
La familia de Scott expresó su decepción por la decisión de retirar los cargos y señaló que "pedimos a todos que trabajen juntos para arreglar un sistema que de entrada permitió que esta tragedia ocurriera".
La policía local dio a conocer previamente dos videos grabados en el lugar de los hechos y tres fotografías de una pistola, una pistolera y mariguana presuntamente encontrados en el cuerpo de Scott.
Pero el video, con mucho grano, no logró presentar una prueba definitiva de que Scott llevaba un arma en la mano al momento del incidente.
Los familiares de Scott sostienen que lo que llevaba consigo era un libro, no un arma.
El incidente generó indignación en Charlotte y aumentó la desconfianza de muchos residentes locales hacia la policía.
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