SANTIAGO, 4 dic (Xinhua) -- El gobierno de Chile aprobó un plan para combatir el cambio climático a través de un proyecto que se prolongará hasta 2030 y que pretende disminuir más de 30 por ciento las emisiones de carbono, informó hoy el Ministerio de Energía.
La medida tiene como objetivo abordar la variabilidad climática y apoyar una transición paulatina hacia una economía y una matriz energética "significativamente más baja" en carbono hacia 2050, agregó en un comunicado.
El plan entronca con los compromisos establecidos por el gobierno que encabeza Michelle Bachelet en la Política Energética Nacional, el cual se basa en la "urgencia" de aportar a la lucha internacional contra el cambio climático.
"El aprovechamiento de los recursos energéticos renovables, así como combustibles de bajas emisiones, y la profundización de acciones en materia de eficiencia energética, son elementos cruciales en esta transición", afirmó el Ministerio.
El ministro de Energía, Andrés Rebolledo, señaló que el plan es "novedoso y desafiante a la vez", al explicar que la reducción de las emisiones de carbono es un compromiso que Chile adquirió con el Acuerdo de París.
El Acuerdo de París es un pacto suscrito por más de 90 países dentro del marco de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el cambio climático, el cual establece medidas para la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.
"Es inédito y un primer paso que da Chile y el sector energía para establecer un marco de política de reducción de emisiones", indicó Rebolledo.
El gobierno de Bachelet ha afirmado que con este proyecto el sector energético será capaz de reducir en un 30 por ciento su intensidad de emisiones a 2030, y de alcanzar un 35 por ciento si se masifica el uso de electricidad en la demanda final de energía, como electrificar el transporte y la calefacción en hogares.
"Es tan relevante tomar medidas en generación, pero también en transporte, minería y sector público, comercial y residencial, si queremos cumplir con la meta propuesta en París", añadió Rebolledo.
En la actualidad, el 17 por ciento de la generación eléctrica de Chile procede de energía solar y eólica, y si se suma la hidroeléctrica se llega a 40 por ciento.
Chile es uno de los países con más posibilidades en cuanto a energías renovables.
El norte del país es uno de los lugares con más días de sol al año, y en esta región están ubicadas varias de las plantas fotovoltaicas más grandes de América Latina.