BUENOS AIRES, 29 ene (Xinhua) -- El presidente de Argentina, Mauricio Macri, anunció hoy lunes un programa de ajuste a la estructura del Estado, para lo cual se recortarán cargos políticos en un 25 por ciento, se congelarán sueldos de funcionarios y se impedirá que ministros designen a familiares en puestos públicos.
"La austeridad tiene que partir de la política. Como servidores públicos, nuestra única prioridad es trabajar para mejorar la vida de los ciudadanos", afirmó el mandatario en un acto en la Casa Rosada (palacio de gobierno) en Buenos Aires.
En su primer acto público tras la gira que realizó por Rusia, Francia y Davos (Suiza), el presidente comentó que la iniciativa incluye tres aspectos.
"Vamos a reducir uno de cada cuatro cargos políticos del Ejecutivo nacional y este año los funcionarios no tendrán un aumento de sueldo", a lo que se suma un decreto próximo a la firma, por el cual "los familiares de ministros no van a poder ser parte del gobierno".
Hay "necesidad de cambiar la cultura del poder, que no nos permite construir un rumbo compartido", expuso Macri.
Argentina cuenta en la actualidad con 20 ministerios, 87 secretarías de Estado, 207 subsecretarias, 687 direcciones nacionales y generales, así como 122 institutos y organismos.
"El Estado es una maraña burocrática", dijo Macri, quien agregó que "todos tenemos que ceder algo para que gane el conjunto. El esfuerzo vale la pena".
La reducción implica la eliminación de unos 1.000 puestos de trabajo y un ahorro de unos 1.500 millones de pesos este año, el equivalente a 75 millones de dólares.
La medida tiene lugar en medio del intento del gobierno argentino de reducir el déficit primario, mediante un ajuste en los gastos públicos.
En 2017, Argentina superó las expectativas en la materia, al ubicarse el déficit primario en 3,9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), frente a la estimación inicial de 4,2 por ciento, según dio a conocer la semana pasada el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne.
En conferencia de prensa en el Palacio de Hacienda, Dujovne atribuyó esta cifra a una baja del gasto público que no se registraba desde 2004, bajo la administración del entonces presidente Néstor Kirchner (2003-2007).
"La mejora en el resultado primario fue posible gracias a que en 2017, por primera vez desde 2004, los gastos crecieron menos que los ingresos, mientras que los ingresos aumentaron 22,6 por ciento", enfatizó el titular de Hacienda.
En total, la merma del déficit ubicó los gastos de la nación austral en 404.000 millones de pesos (unos 20.200 millones de dólares), señaló Dujovne.
La meta de reducción fijada por la cartera de Hacienda para 2018 es de un déficit primario de 3,2 por ciento, mientras que para 2019 es de 2,2 y de 1,2 por ciento para 2020.
El gobierno prevé lograr estas metas mediante un achicamiento del Estado y con la eliminación de subsidios en energía (gas y electricidad), con excepción de la tarifa social y de transporte para el 2021.