BRASILIA, 30 may (Xinhua) -- La Federación Unica de los Petroleros (FUP) de Brasil anunció hoy miércoles el inicio de un paro laboral de 72 horas que alcanza refinerías, terminales y plataformas, incluso en contra del Tribunal Superior del Trabajo (TST) que lo consideró abusivo.
El movimiento programó actos y manifestaciones a lo largo de la jornada, en preparación a una futura huelga del gremio por tiempo indeterminado.
Los trabajadores petroleros afirman que el movimiento es una reacción a la política de precios de los combustibles y una crítica a la gestión del actual presidente de la estatal Petróleo Brasileño Sociedad Anónima (Petrobras), Pedro Parente.
De acuerdo con el balance de la FUP, los trabajadores cruzaron los brazos en las refinerías de Sao Paulo, Minas Gerais, Paraná, Río Grande do Sul, Amazonas y Pernambuco.
Están paradas además la Fábrica de Lubricantes de Ceará, de Araucaria Nitrogenados y la unidad de esquisto de Paraná.
En la Cuenca de Campos, en Río de Janeiro, el mayor polo petrolero del país, los trabajadores también se adhirieron al paro en diversas plataformas.
La FUP afirmó, sin embargo, que no hay riesgo de desabastecimiento de combustible en el país.
El coordinador general de la FUP, José María Rangel, afirmó en un comunicado que "los tanques de las refinerías están abarrotados de derivados de petróleo, en función de las protestas de los camioneros".
"Nuestra huelga es para defender a Brasil, es para que los brasileños paguen un precio justo por el gas de cocina y los combustibles", agregó.
El TST consideró el martes esta acción de los petroleros como "abusiva".
Estipuló además una multa de 500.000 reales (135.000 dólares) por día para los sindicatos en caso de incumplimiento, después de la demanda presentada por Petrobras y la Abogacía General de la Unión (AGU).
La acción de los petroleros ocurre tres días después de que el presidente Michel Temer y su equipo negociaran un acuerdo con los camioneros.
Por más de una semana, los camioneros paralizaron el país, provocando desabastecimiento en estaciones de gasolina, aeropuertos y supermercados, lo que afectó todas las actividades económicas.