Por Victoria Argüello
BUENOS AIRES, 30 may (Xinhua) -- Considerada como una provincia vitivinícola, Mendoza (oeste) es el lugar de Argentina donde se fabrican vinos con destino a China que deleitan a sommeliers, curiosos y fanáticos.
Numerosos productos primarios y de valor agregado que se fabrican en Mendoza, que están liderados por el vino, mosto de uva concentrado y el aceite de oliva, son parte de los rubros que compra China por medio de importadores locales.
El director Ejecutivo de la Fundación Promendoza, la encargada de la promoción de las ventas al exterior y atracción de inversiones, Mario Lázzaro, valoró la expansión y progresiva sofisticación del mercado chino, lo cual ha otorgado un impulso sin precedentes al comercio bilateral.
En entrevista con Xinhua, Lázzaro consideró al país asiático como un "importante socio de Argentina" para distintas áreas productivas, pero sobre todo, para la promoción de exportaciones locales conducentes a "llevar lo mejor de Argentina a distintas ciudades de China".
"El año pasado exportamos cerca de 20 millones de dólares a China, de los cuales la mayor parte fue vino embotellado y mosto concentrado. Tenemos posibilidades de crecimiento con China", aseguró.
Promendoza es una entidad público-privada integrada por cámaras empresariales de la provincia a través de los ministerios de Hacienda y de Finanzas, la Unión Comercial e Industrial (Ucim), el gobierno provincial y la Bolsa de Comercio de Mendoza.
"Mendoza produce alimentos, frutas, hortalizas, y la industrialización de esos productos, que el más famoso que tenemos es el vino, junto a la uva, y toda esa producción no se encuentra cercana a la ciudad sino que está extendida en toda la ciudad", explicó Lázzaro.
Dijo que pese a las dificultades que históricamente ha tenido la actividad productiva en esta provincia contigua a la cordillera andina, principalmente por los factores climáticos, la rápida cooperación y la organización en materia comercial, tanto a nivel interno como externo, ha permitido la consolidación de la industria.
El directivo explicó que al igual que con otros países, a China se comenzó exportando vino "a granel", vino sin embotellar, el cual era trasladado en grandes contenedores, situación que posteriormente cambió.
"A medida que fue pasando el tiempo, Argentina se tecnifica y obtiene vinos de grado mundial y comienza primero a vender vinos de bajo precio para luego ir incorporando los vinos de alto precio", dijo.
"Por su parte, en la medida que la economía china fue creciendo, su población se fue habituando a tomar vinos de mayor precio y he allí la confluencia", precisó.
Recientemente, 23 bodegas de distintas marcas y cepas, lideradas por Malbec y Torrontés, originarias de Mendoza, visitaron las ciudades chinas de Beijing, Shanghai, Xiamen, Guangzhou y Shenzhen para exponer sus vinos en la Interwine Wine & Spirits Exhibition 2018, la feria más grande del sur de China especializada en vinos, y en varios "road shows".
Algunas de estas bodegas fueron Andeluna, Belhara States, Casarena, Jasmine Monet, Iaccarini, Los Haroldos, Proemio Wines, Tittarelli y Mendoza Family Wines Group.
"El año pasado crecimos, entre un 7 y 10 por ciento por año nuestras exportaciones a China de vino y en este preciso momento aspiramos a crecer más", comentó el director ejecutivo de Promendoza.
"Las relaciones son bastantes importantes y aunque no hemos desarrollado todo lo que queremos, hemos planteado el intercambio y desarrollo turístico porque es muy importante para los turistas de ambos países", sostuvo.
Para Lázzaro, las cámaras empresariales y autoridades de Mendoza tienen un camino amplio que recorrer junto a China, un país al que admiran su potencial industrial, mucho de ello requerido para las actividades agrícolas.
"En la medida que sigamos trabajando encontraremos mayores puntos de interés en común, porque hay compras de Mendoza de productos de China, incluso hechas por el mismo gobierno, como por ejemplo de maquinaria vial", puntualizó.
Dentro de las metas o desafíos, comentó Lázzaro, se encuentra buscar mecanismos que faciliten las ventas en el mercado chino, que lleven a explorar la posibilidad de "formar bases, plataformas y logísticas comerciales en zonas francas de China".
Consideró que existe una oportunidad sin precedentes para que Argentina aumente la exportación de productos con valor agregado.
Para ambos casos, Lázzaro ponderó la Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE, por sus siglas en inglés), que se celebrará en noviembre próximo en la ciudad de Shanghai.
"Me parece importantísimo que afianzando la relación con China podemos dejar atrás los problemas de vender solo producción primaria, y ejemplo de ello es el vino, dónde la tecnificación y la mejora de su calidad no ha ido en detrimento de las ventas", comentó.
Para Lázzaro, Argentina tiene muchas oportunidades de exportación de productos con mayor valor.
"Como las ciruelas deshidratas a las cuales se les puede agregar valor si se introduce en su proceso de producción el chocolate, la miel, nueces o frutos secos. Incluso si se optimiza el empaquetado, manifestó.