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Cincuenta y cinco años resguardando el patrimonio musical de Cuba

Actualizado a las 01/04/2019 - 09:37
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Por Raúl Menchaca

LA HABANA, 31 mar (Xinhua) -- Más de 80.000 títulos conserva la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales de Cuba (EGREM), que hoy cumple 55 años preservando el rico patrimonio musical de este país, al que muchos llaman "La isla de la música".

La EGREM, convertida en la principal casa disquera de la isla, fue fundada en 1964 en los mismos estudios que entonces ocupó la empresa Panart, la primera discográfica propiedad de un cubano.

Fue un avispado músico e ingeniero Ramón Sabat, quien creó la Panart en 1944, luego de formarse profesionalmente en Estados Unidos y comprender la riqueza musical de su país, cuyos intérpretes hasta ese momento sólo grababan con sellos extranjeros.

El nacimiento de Panart generó la creación gradual de otras disqueras, como Gema, Puchito, Discuba y Kubaney, que convivieron con éxitos dispares.

El triunfo de la Revolución encabezada por Fidel Castro, en enero de 1959, significó dos años después la nacionalización de esas discográficas y la instalación de la Imprenta Nacional de Cuba en las instalaciones que ocupó la Panart y que después serían los Estudios Areito, administrados por la naciente EGREM.

Prácticamente todas las grandes figuras del pentagrama nacional se unieron a ese sello, que no sólo graba y edita fonogramas, sino que también organiza los festivales del disco cubano, CUBADISCO, y otorga el Premio EGREM, como reconocimiento de las mejores producciones musicales.

"La EGREM es música, cultura, cubanía", afirmó ahora el director general de esa empresa, Mario Escalona, para quien este aniversario significa llegar "a una etapa de madurez".

Escalona es consciente de que en el contexto actual es necesario emplear las redes sociales para promover de manera eficiente el producto musical cubano, aunque en ese sentido insistió en que hay que estar dotados de conocimientos y métodos.

Hoy las matrices digitalizadas de Panart y de la EGREM se preservan en el Centro de Información y Conservación de Archivos Musicales, en La Habana, como parte de las colecciones Memorias, Cuba en Vivo y Boleros de Oro.

Ese archivo acaba de ser declarado como Patrimonio Cultural de la nación, una decisión que busca asegurar el resguardo de sus fondos.

La empresa conserva lo que se considera como el mayor fondo de archivos musicales de Latinoamérica, por eso no resulta sorprendente que a pesar de los problemas en la relación política entre Estados Unidos y Cuba, haya firmado hace poco más de un año un convenio de presentación con la compañía Sony ATV Music Publishing.

El acuerdo incluye la representación a largo plazo de más de 10.000 obras de diversos géneros y autores de gran prestigio dentro y fuera de la isla, lo que constituye el más importante convenio internacional firmado hasta el momento con una editorial musical cubana.

La alianza establecida con la mayor compañía editorial del mundo ofrece acceso a una gran colección de derechos de autores cubanos, que incluye obras compuestas por Sindo Garay, Ignacio Piñeiro, Carlos Puebla, José Antonio Méndez, Adolfo Guzmán, Benny Moré y César "Pupy" Pedroso, entre otros.

"Animados por la trascendencia y el prestigio de los artistas y compositores asumimos este contrato, que da seguimiento al acuerdo firmado entre la EGREM y la compañía Sony Music Entertainment, en septiembre de 2015, para la distribución internacional de las matrices de grabaciones de la disquera cubana", subrayó entonces Escalona.

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