MADRID, 2 abr (Xinhua) -- El FC Barcelona sacó a relucir el corazón de campeón del equipo para empatar 4:4 frente al Villarreal un partido que perdía 4:2 en el minuto 89 y dar así otro paso para sumar su segundo campeonato de LaLiga consecutivo.
Ante un Villarreal que se juega la vida por su delicada situación sobre el descenso, dos puntos por encima de la línea fatídica, Valverde realizó rotaciones pensando en la Champions League y dejó en el banquillo a Piqué, Rakitic y Messi.
Pero inmerso en esa dinámica de campeón en la que todo sale siempre bien, el Barcelona se puso 0:2 antes del minuto 15 gracias a los goles de Coutinho primero y Malcom después.
Quizá por ese exceso de confianza el equipo azulgrana se relajó y vio cómo Samu Chukwueze recortaba distancias en el minuto 22 y posteriormente Toko Ekambi, el mejor del Villarreal esta temporada, colocaba el 2:2 nada más volver del descanso.
Consciente de sus urgencias, el Villarreal desató un vendaval de juego que se saldó con el 3:2 De Vicente Iborra en el 61 y el posterior golazo de Bacca en el 79 (4:2) en un tanto que dejó en mal lugar a Umtiti por su lentitud.
Pero el conjunto amarillo cayó preso de la tensión que siempre se percibe al estar tan cerca del descenso y en el 85' Alvaro González, bastión del Villarreal en defensa, se marchó expulsado por doble amonestación.
El Barcelona, ya con Lionel Messi sobre el campo, olió la sangre y el argentino recortó distancias con su sexto gol de falta del campeonato.
El Villarreal terminó por perder los nervios y se vino abajo en un tiempo de descuento en el que Luis Suárez, tan mortal en LaLiga como romo en Europa, empató con un golazo de volea a la salida de un córner para dar un punto útil al Barcelona y mantener a los amarillos en tensión.
El Atlético de Madrid, segundo clasificado, aprovechó el pinchazo del Barcelona para ganar 2:0 al Girona y ponerse a ocho puntos de los azulgranas.
El partido olía a cuentas pendientes ya que el Girona eliminó sorpresivamente a los rojiblancos en octavos de la Copa del Rey y aguerrido se presentó el Atlético, que sin embargo no pudo hacer nada para doblegar a su rival.
Hasta el minuto 75 no se adelantó el Atleti en el marcador y fue gracias a un gol de Godín que resolvió una jugada más que dudosa que sin embargo el sistema de videoarbitraje resolvió a favor de los del Cholo Simeone.
Con el Girona volcado al ataque para volver a amargar la fiesta al Atlético, Griezmann resolvió con calidad un contraataque y puso el 2:0 definitivo que permite a los rojiblancos apurar sus remotas opciones de luchar por LaLiga.
En la jornada del miércoles también hubo turno para Wu Lei y su RCD Espanyol, que recibían al cuarto clasificado, el correoso Getafe.
Tras descansar ante el Barceona el pasado sábado, el atacante chino fue de nuevo titular y volvió a presentar una hoja de servicios inmaculada, llena de regates, desbordes y una omnipresente sensación de peligro.
Borja Iglesias, que se afianza como estrella de LaLiga, anotó su 12º gol en su primer año en la competición y puso 1:0 al Espanyol.
Wu Lei merodeó el segundo tanto, pero el Getafe, siempre competitivo, terminó por empatar gracias a un gol de Ángel Rodríguez.
El Espanyol se mantiene en la zona templada de la tabla y el Getafe deberá esperar al resto de la jornada a ver si mantiene el puesto que le daría acceso a jugar Champions League la temporada o le supera el Alavés, que a su vez tiene un duro partido frente al Sevilla.