Por Huang Yinjiazi, Shi Hao y Shang Xu
BEIJING, 5 jun (Xinhua) -- "Para un gran barco, un gran viaje", dijo Xi Jinping, citando un proverbio ruso durante su primera visita a Rusia como presidente de China en 2013.
Él estaba llamando a sumar esfuerzos concertados por parte de China y Rusia para construir sus relaciones como un barco lo suficientemente grande y fuerte como para abrirse camino a través del mar cambiante de la situación internacional.
Xi practica lo que promueve. Durante los últimos seis años, el presidente chino se ha reunido con su homólogo ruso, Vladimir Putin, casi 30 veces en una racha inusualmente vigorosa de diplomacia entre jefes de Estado, y los dos líderes han convertido la relación China-Rusia en un gran barco con el mayor grado de confianza mutua, el más alto nivel de coordinación y el más alto valor estratégico.
"He tenido interacciones más cercanas con el presidente Putin que con cualquier otro colega extranjero. Es mi mejor e íntimo amigo. Valoro mucho nuestra profunda amistad", dijo Xi en una entrevista con medios rusos el martes antes de su octavo viaje presidencial a Rusia.
En momentos en que los dos países celebran el 70 aniversario de sus relaciones diplomáticas este año, Xi viajó a Rusia el miércoles para otra visita de Estado al vecino norte de China, donde también asistirá al Foro Económico Internacional de San Petersburgo por primera vez.
Xi dijo que espera trazar el curso de las relaciones entre China y Rusia junto con Putin, y ver que su asociación estratégica integral de coordinación se abrirá paso hacia una nueva era.
POR LOS VIEJOS TIEMPOS
La amistad entre los dos presidentes zarpó a principios de la primavera de 2013 cuando Xi llegó a Moscú para su primera visita al extranjero como jefe de Estado chino.
Además de asistir a más de 20 actividades y reunirse con personas rusas de diversos ámbitos, Xi se convirtió en el primer jefe de Estado extranjero en recorrer el centro de comando de combate de las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa.
Putin, quien pasó ocho horas con Xi durante su estadía en Moscú de tan solo un día y medio, dijo que la visita fue de importancia histórica.
En uno de los momentos más memorables de esta visita, Xi presentó en el Kremlin un retrato de Putin bordado con hilos de seda en 70 colores. "Es tan legendario, tan hermoso y tan increíble", se maravilló Putin.
"Estoy usando la misma corbata", bromeó Putin, señalando la corbata escarlata que llevaba ese día al igual que en el retrato.
Mucho antes de la visita histórica, los dos presidentes ya habían desarrollado una afición por el país del otro.
Xi, nacido en la década de 1950, fue influenciado por la literatura rusa tanto como por otras personas de su generación en China. Mencionó a los escritores rusos como el poeta Alexander Pushkin y al novelista Anton Chekhov cuando pronunció un discurso en el Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú.
"Encontré el encanto de la literatura rusa", dijo Xi.
Putin, amante de los deportes, es fanático de las artes marciales chinas. Durante una visita de Estado a China en 2006, visitó el Templo Shaolin, la cuna del kung fu chino, en el pie oeste de la montaña Songshan, en la provincia central de Henan.
Después de ver un espectáculo de artes marciales, el presidente ruso caminó hacia los deportistas y arrojó al aire a un monje de ocho años y lo atrapó firmemente en su hombro.
VÍNCULO INQUEBRANTABLE
En septiembre de 2016, la ciudad oriental china de Hangzhou seguía sufriendo de un calor sofocante. Putin, quien se encontraba en la ciudad para la cumbre del G20, presentó a Xi con la manera perfecta de refrescarse: una caja de helado ruso.
Desde entonces, se desató el gusto por la especialidad rusa en China, beneficiando a muchos fabricantes de helados. Una compañía heladera con sede en la ciudad de Khabarovsk, en el Lejano Oriente de Rusia, recibió a cerca de 100 importadores chinos durante los tres meses posteriores a la cumbre, según su gerente.
Se trata de un ejemplo primordial de cómo las interacciones entre Xi y Putin estimulan la cooperación entre sus países.
"Ambos, el presidente Putin y yo, hemos prestado gran importancia y hemos promovido activamente la cooperación entre China y Rusia en comercio y economía", afirmó Xi durante una visita de Estado a Rusia en 2015.
Cuando China decidió albergar en 2017 el foro internacional sobre la iniciativa de la Franja y la Ruta, una propuesta con el objetivo de construir un sistema comercial y de infraestructura que conecte Asia con Europa y Africa a lo largo de las antiguas rutas comerciales de la Ruta de la Seda, Putin fue uno de los primeros líderes en apoyar la iniciativa. Putin también asistió al segundo foro.
Con los dos mandatarios a la cabeza, se han logrado destacados éxitos en fomentar la iniciativa de la Franja y la Ruta y la Unión Económica Euroasiática encabezada por Rusia. El alineamiento no solo ha impulsado la prosperidad regional, sino que también ha dado señales al mundo exterior del compromiso de China y Rusia con una economía mundial abierta.
Con el mismo espíritu de apoyo mutuo, Xi asistió al Foro Económico Oriental celebrado en Vladivostok y tomará el podio en el Foro Económico Internacional que se celebrará en San Petersburgo.
El hecho más significado es que los dos líderes también han influenciado cómo los dos pueblos ven y se relacionan el uno con el otro.
En 2015, cuando Xi otorgaba medallas conmemorativas a veteranos rusos que lucharon en el campo de batalla en China durante la guerra de resistencia china contra la agresión japonesa, vio a un anciano de 90 años que tenía dificultad para caminar.
"Déjeme ayudarle", dijo Xi al veterano. La conmovedora escena despertó vívidos recuerdos de los dos pueblos de la antigua y profundamente enraizada amistad entre las dos naciones forjadas con vidas y sangre durante los tiempos de guerra.
Basados en estos cimientos, los dos pueblos han pasado sus vínculos de generación en generación.
PENSANDO DE MANERA SIMILAR
En 2017, Putin concedió a Xi el máximo honor de Rusia, la Orden de San Andrés Apóstol el Primer Llamado. Putin dijo a Xi que aunque "es el líder de un gran país, no ha hablado mucho acerca de sus propias contribuciones. Es usted muy humilde".
"Muchas de las cuestiones clave entre Rusia y China o bien fueron resueltas o bien registraron progresos gracias a su esfuerzo personal", dijo. "La Orden es una prueba de sus notables contribuciones a la construcción de las relaciones entre Rusia y China".
Un año después, Xi otorgó a Putin la primera medalla de la historia de la Amistad de la República Popular China.
El liderazgo práctico de los dos presidentes en la promoción de las relaciones China-Rusia deriva de su perspectiva común sobre la importancia de los vínculos bilaterales y sobre las cuestiones internacionales.
"Compartimos puntos de vista similares en el panorama internacional y sobre el enfoque de la gobernanza nacional", dijo Xi en entrevista con medios de comunicación rusos, añadiendo que "lo que es más importante, compartimos un alto grado de consenso sobre la importancia estratégica de las relaciones China-Rusia y, por tanto, la misma determinación y el deseo de profundizar y mantener su crecimiento".
Putin ha subrayado en varias ocasiones que es una prioridad de la política exterior de Rusia profundizar la asociación estratégica integral de coordinación con China.
Xi, ya durante su primera visita de Estado a Rusia hace seis años, dijo que China y Rusia disfrutan de una de las relaciones bilaterales más importantes del mundo y de la mejor de las relaciones entre países principales.
En su opinión, unas relaciones fuertes y de alto nivel entre China y Rusia no solo sirven a los intereses de ambas partes, sino que también desempeñan un papel importante en el mantenimiento del equilibrio estratégico internacional y la paz y estabilidad mundiales.
Esta línea de pensamiento ha guiado las interacciones China-Rusia en marcos bilaterales y multilaterales. "Durante muchos años, ambos países han realizado esfuerzos para mejorar el sistema de gobernanza mundial para hacerlo más equitativo e inclusivo", dijo Yana Leksyutina, profesora de la Universidad Estatal de San Petersburgo.
Dmitry Novikov, vicepresidente primero de la Comisión de Asuntos Internacionales de la Duma Estatal de Rusia, dijo en una reciente entrevista con Xinhua que el nivel sin precedentes de interacción entre China y Rusia se ha convertido en un modelo avanzado de las relaciones interestatales en el mundo de hoy.
"No sería una exageración decir que la gente común del planeta nos mira con esperanza y fe, a la espera de la creación de un orden mundial más justo", dijo.