CARACAS, 14 dic (Xinhua) -- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró en un video que abrirá nuevamente "las puertas de Miraflores" (Palacio de Gobierno) para retomar el diálogo con la oposición en aras de ofrecer mayor estabilidad y progreso a los ciudadanos de esta nación suramericana.
No obstante, el jefe de Estado advirtió que el gran obstáculo para materializar este encuentro no radica en el Ejecutivo, presto a solucionar los problemas actuales, sino en los sectores de derecha que no cuentan con un liderazgo a nivel nacional y tampoco con la voluntad de trabajar en conjunto por el bien del país.
Tales declaraciones las pronunció el mandatario en una entrevista concedida al periodista y ex vicepresidente venezolano José Vicente Rangel, la cual fue transmitida hoy por el canal privado Televen, donde evaluó el contexto socio- económico y político del país, y expuso sus perspectivas para 2015.
"Mañana mismo yo abriría las puertas de Miraflores para dialogar con los sectores políticos. Ahora me pregunto: ¿A quién llamo? Si todos tienen miedo de dar un paso. ¿A quién se llama? ¿Quién representa a la oposición? No hay un vocero de la oposición que yo agarre el teléfono y llame y diga que este es el líder de la oposición. No tengo interlocutor, ni hay un grupo de líderes", lamentó Maduro.
Ante esa realidad, el dignatario manifestó la necesidad del surgimiento de una oposición seria en Caracas, que represente a los ciudadanos contrarios a su gobierno, y que no tome ese espacio para crear "atajos" sujetos a intereses individuales y revertir los logros obtenidos por la Revolución Bolivariana en los últimos 15 años.
Igualmente, criticó la actitud asumida por los representantes de la denominada Mesa de la Unidad Democrática (coalición de partidos de derecha) que de manera unilateral decidieron suspender las jornadas de diálogo con el Ejecutivo en mayo pasado.
Tras un mes de conversaciones entre ambos sectores políticos, los voceros de la oposición "congelaron" el diálogo al exponer falta de resultados, y condicionar la continuidad del proceso a la liberación de los responsables de la muerte de 43 personas inocentes durante las protestas violentas registradas en el primer semestre del 2014.
Sobre este tema, Maduro consideró que a pesar de las pérdidas humanas ese hecho fue un "gran aprendizaje", porque demostró "la necesidad de escucharnos como venezolanos, de dejar al lado la violencia y aislar a los violentos, de buscar por la vía del diálogo fórmulas posibles para avanzar (...) no se puede buscar excusas en los problemas de un país para imponer las ambiciones personales o de grupos económicos".
El jefe de Estado resaltó, además, que la situación acentuó el nivel de organización y conciencia del pueblo en este año que concluye, un elemento a tomar en cuenta para tener mayor certeza en la continuidad y consolidación del proyecto revolucionario bolivariano.